Alcaldías, un proyecto engañabobos: Monreal

El Jefe delegacional en Cuauhtémoc, Ricardo Monreal, consideró que “no valdrá la pena ser alcalde en 2018” si la figura de alcaldía planteada en el proyecto de la Constitución de la Ciudad de México no otorga a los titulares las facultades necesarias para gobernar con autonomía.

“Esta figura de la alcaldía es barroca, regresiva, mentirosa, engañabobos. Si se mantiene, a ver quién se anima a ser alcalde. Si no le dan facultades amplias al alcalde no vale la pena. Ganaríamos mucho cuando en enero digan que no hubo Constitución”, afirmó Monreal.

El líder delegacional sostuvo que es necesario que se modifique el artículo 122 del proyecto constitucional para que se reconozca a las delegaciones como municipios.

De acuerdo con el exgobernador de Zacatecas, la crítica al texto se sustenta porque la reforma política de la Ciudad de México no se llevó a cabo sobre el artículo 115 constitucional, que rige a los más de 4 mil 500 municipios del país, sino sobre el artículo 122, donde quedó establecido el Estatuto de Gobierno del Distrito Federal.

“El problema de fondo surge del pacto donde no debió aceptarse la modificación al 122 constitucional. Hay que votar en contra porque los problemas que enfrentamos los delegados no pueden ser atendidos y no los permite el planteamiento porque no permite autonomía, pues no da más que un estatus jurídico especial”, asentó al tiempo de volver a exigir facultades en materia de seguridad, deuda y fomento al empleo.

Explicó que el diseño de alcaldías no propone en modo alguno el aumento de herramientas administrativas, de seguridad ni capacidad de decisión en los usos de suelo así como el cobro de impuestos.

De esta manera, abundó, que no existe diferencia alguna entre las actuales delegaciones y las futuras alcaldías.

Aseguró que la inclusión de un concejo como supervisor de las acciones del alcalde es una buena oportunidad para aumentar el ejercicio de la representación popular y destacó que la limitación en los alcances del ejercicio de Gobierno transforman a este organismo en un freno para la toma de decisiones.

“Estamos en una discusión vana si no hay voluntad para aumentar los alcances de los alcaldes. Entonces no queremos nada, sería mejor para quienes somos delegados y quienes serán alcaldes: ahora hay un concejo por encima de nosotros. Es tan grave la definición política y constitucional, que vamos a verlo pronto en la práctica”, precisó.