Capitalinos vuelcan festejo a difuntos

Luego de casi 18 meses de encierro por la pandemia de Covid-19, decenas de familias capitalinas se dieron “un respiro” durante este fin de semana largo, para disfrutar de la Mega Ofrenda en la plancha del Zócalo y las actividades que tuvieron lugar con motivo del Día de Muertos en varios puntos de la ciudad.

La familia de los López Domínguez, conformada por la madre, el padre, dos adolescentes y una pequeña, salió a disfrutar de la ofrenda, “con todas las precauciones”, luego de no haber tenido oportunidad de tener un puente durante la contingencia ocasionada por el Covid-19.

“Él (su esposo) perdió el trabajo y a mí me bajó muchísimo durante toda la pandemia; no se podía salir, tenemos a la niña chiquita, entonces fue una época dura, por eso aprovechamos que (la Ciudad de México) está en verde (en el semáforo epidemiológico) y que abrieron, para venir a ver estas cosas tan bonitas”, comentó Marcela, madre de familia, para quien la festividad a los muertos significa una de las épocas “más importantes” de la cultura mexicana.

Para su familia, éste es el “primer puente” que toman desde marzo del 2020, cuando se detectaron los primeros casos del virus y se llamó a los ciudadanos a implementar las medidas de la Jornada Nacional de Sana Distancia.

Como ellos, otros capitalinos aprovecharon para despejar la mente, “celebrar a la vida” y tomarse un tiempo de descanso tras los meses más severos de la pandemia.

“Se sintió como un break, por lo menos para los que sí tomamos la cuarentena en serio, pues poder salir se disfruta yo creo que más (...) Además, ya vacunados, con cubrebocas, gel, pero festejando y celebrando a la muerte y a la vida”, aseguró un joven que acudió junto a su madre para disfrutar del papel picado, las flores de cempasúchil y el resto de arreglos de temporada que decoran desde este sábado el corazón de la capital, como un homenaje a los 500 años de la resistencia indígena de México-Tenochtitlan.

La plancha del Zócalo no fue el único espacio al que los capitalinos aprovecharon para escaparse. En los alrededores, desde el 31 de octubre se observaron familias paseando en los lugares emblemáticos de la Ciudad de México, entre ellos la plaza Tolsá, afuera del Museo Nacional de Arte (Munal), donde se colocó una ofrenda en honor a Saturnino Herrán, así como los altares, ferias de pan de muerto y promociones que se aperturaron durante estos días; y en el Paseo de la Reforma, donde regresaron los mexicráneos, luego de la crisis.

Ayer, la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, aseguró que después de “tantos meses” en los que hubo quienes perdieron a familiares, amigos y conocidos, los festejos a los muertos son una celebración “a la vida” y una manera de dejar atrás los meses difíciles.

“No sabemos todavía qué viene hacia delante, pero, por lo pronto, pues estamos ya todos vacunados”, aseveró la mandataria, al término del evento de rendición de protesta de Indira Vizcaíno como gobernadora de Colima, al que la mandataria capitalina fue invitada.

A lo largo de este fin de semana, también se observó a miles de ciudadanos quienes acudieron a los panteones locales en las 16 alcaldías, aunque con cubrebocas y medidas de distanciamiento social, para llevar flores y limpiar las tumbas de sus difuntos, algunos, después de más de un año de no visitarlos.

Los protocolos de ingreso fueron estrictos; en algunos casos, incluso, se solicitó a los menores de edad y adultos mayores no acudir; además, en algunas demarcaciones, como la Miguel Hidalgo, se solicitó a la población no acudir con bebidas alcohólicas.

Rocío, habitante de la alcaldía Cuauhtémoc, al igual que otros miles de ciudadanos, se levantó temprano este lunes para ir a dejarle “sus flores” a dos de sus hermanos y su madre, cuyos restos descansan en el panteón Civil de Dolores, en la Miguel Hidalgo, cuyo ingreso se inició a las 8:00 horas y en una fila, para controlar el acceso de quienes, con cubetas, escobas y ramos de flores, ingresaron a visitar a sus seres queridos.

“Es gratificante porque, en mi caso, mi madre era muy devota de estas fechas. Ella siempre llevaba a la tumba de su mamá y eso nos enseñó, por eso ahora nosotros vamos y es importante, porque el año pasado sólo le rezamos, pero no fuimos en estas fechas”, comentó.

En mercados y romerías, entre ellas de la alcaldía Azcapotzalco, regresaron los tumultos de decenas de personas que acudieron a adquirir productos de temporada.

En Xochimilco, los viajes en trajineras decoradas con flores y motivos de la época, regresaron después de meses de no aceptar personas.