Bienestar de los mexicanos

Derrotero Económico

Por Ma. Mercedes Muñoz

Esta semana el INEGI dio a conocer los resultados sobre la medición del “Bienestar Subjetivo”, es decir como las personas experimentan sus propias condiciones de vida. Este informe es totalmente nuevo y servirá para entender que el bienestar de una persona no puede ser medido de manera idónea sólo por el crecimiento del PIB.

La iniciativa de medir el bienestar de forma más amplia y desde la propia percepción de las personas implicadas es resultado de la famosa Comisión Stiglitz-Sen-Fitoussi, que en 2009 presentó un estudio para la Medición del Desarrollo Económico y del Progreso Social encargado por el gobierno francés de Nicolas Sarkozy.

El INEGI elaboró su medición de bienestar encuestando a las personas que están entre 18 y 70 años de edad y se manejaron preguntas para 15 diferentes temáticas, entre las que destacan: situación económica en general, salud, logros y reconocimientos, libertad y autonomía personal, compromiso con el medio ambiente y empatía con la vida no humana, entre otros. Asimismo la encuesta maneja tres variables dependientes: a) satisfacción con la vida, b) balance afectivo (estados de ánimo positivos y negativos que experimenta una persona) y c) felicidad.

En el caso de satisfacción con la vida, del total encuestado, el 47.3 por ciento afirman estar satisfechos y 36.1 por ciento se sienten moderadamente satisfechos. Considerando la instrucción los mexicanos más satisfechos con la vida son las personas con preparatoria (50.5 por ciento), con licenciatura (53.6 por ciento) y con postgrado (62.7 por ciento).

Ahora bien, tomando en cuenta su condición de actividad, se tiene que los mexicanos más satisfechos con la vida son los pensionados o jubilados (58 por ciento) y los dedicados a estudiar (60.9 por ciento); sin embargo, si lo tomamos por género en cuanto a los que estudian, los hombres se sienten más satisfechos que las mujeres (65.1 por ciento contra 56.9 por ciento).

En cuanto a la categoría de felicidad se tiene que los mexicanos que se sienten felices son el 56.5 por ciento y moderadamente felices el 33 por ciento. Si se analiza por grupo de edad se tiene que las personas más felices (feliz más moderadamente feliz) se encuentran entre 18 y 29 años de edad, 90.6 por ciento; y los que se localizan en el rango de 30 a 44 años de edad, 90.4 por ciento; mientras que los menos felices son las personas entre 45 y 59 años de edad.

Nuevamente si se observa el rubro por nivel de escolaridad se tiene que las personas con grado de licenciatura y postgrado se perciben más felices, 96 y 94 por ciento respectivamente. De igual manera que la variable “satisfecho con la vida”, las personas más felices de acuerdo a la condición de actividad son los que estudian, 95 por ciento; mientras que analizando por género también son los hombres que estudian los que se sienten más felices, con 96.4 por ciento.

Otros datos relevantes de la encuesta son los referentes a las necesidades primordiales. En este caso sobresale el hecho de que el 63 por ciento de los mexicanos apreciaría que se mejore la seguridad pública en su localidad, 61.7 por ciento de ver que el país mejore y 54.5 por ciento de tener más años de estudio o sacar un título. Estas necesidades primordiales reflejan claramente que los mexicanos desean tener más seguridad, un mejor país y más educación. Esto lo deberían de tomar en cuenta los que diseñan las políticas públicas.

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