Fuego y furia, el libro sobre Trump

Fuego y furia, el libro sobre Trump
Por:
  • valeria_lopez_vela

El 18 de marzo de 2003, Dan Brown publicó el controvertido libro El Código Da Vinci y sus principales promotores fueron ciertos sectores de la Iglesia que se sentían aludidos y desprestigiados en una novela: género que se desenvuelve en la ficción literaria de los sucesos y los personajes.

En aquellos días, el propio Brown agradeció a sus detractores el fabuloso éxito de ventas en el que habían convertido a su novela. Sospecho que Trump no leyó el libro de Dan Brown y tampoco se enteró del fiasco que se llevaron quienes querían impedir la lectura del texto.

Quince años después, el realmente inteligente y estable presidente de Estados Unidos, Donald Trump, fungió como el principal publirrelacionista y publicista del libro Fuego y furia: Dentro de la Casa Blanca de Trump de Michael Wolff, cuando intentó impedir su publicación. Al no conseguirlo, se dedicó a desautorizarlo en menos de ciento cuarenta caracteres. El resultado comercial no podía haber sido mejor: el libro se convirtió en best seller.

Hay dos aspectos que me gustaría enfocar del libro. Primero, el texto pone en duda la salud mental del presidente y algunos periodistas han sostenido que este tipo de afirmaciones sólo pueden hacerlas los médicos especialistas. No estoy del todo de acuerdo.

Hagámonos algunas preguntas: ¿solamente un ortopedista se da cuenta de la discapacidad motriz de un ciudadano? ¿Sólo los mecánicos perciben que un coche se ha calentado? ¿Es exclusivo de los chefs saber cuando un platillo está quemado? En todos los casos, me parece que no. Hay ciertas patologías o fallas que son perceptibles para las miradas no entrenadas; esto no significa que puedan darnos la causa o prescribir una cura o solución, pero no hace falta tener un doctorado en psiquiatría para notar inestabilidad emocional y la limitación intelectual de Donald Trump.

Segundo, la discusión sobre la 25 enmienda se anuncia desde la página 297 pero encuentra su punto en la 308. Wolff sostiene que Steve Bannon dijo que había 33% de posibilidades que la investigación del fiscal especial Mueller desencadenara la destitución del Presidente; 33% que Trump renunciara por el apartado 4 de la 25 enmienda que textualmente dice que el Vicepresidente asumiría las funciones del presidente: “Cuando el vicepresidente y la mayoría de los principales funcionarios de los departamentos ejecutivos o de cualquier otro cuerpo que el Congreso autorizara por ley trasmitieran al presidente pro tempore del Senado y al presidente de la Cámara de Representantes su declaración escrita de que el presidente está imposibilitado para ejercer los poderes y obligaciones de su cargo, el vicepresidente inmediatamente asumirá los poderes y obligaciones del cargo como presidente en funciones”. Y, finalmente, un 33% de que el presidente cojeara hasta el final de su mandato. De acuerdo con Wolff, el principal asesor del presidente estimaba que había un 66% de probabilidades de que Trump no terminara su periodo. Y, además, era imposible pensar en la reelección.

El principal valor que encuentro en Fuego y furia es que muestra que dentro y fuera de la Casa Blanca se escuchan las mismas palabras y los mismos ecos sobre esta administración.