El miedo viaja en "taxi seguro"

El miedo viaja en "taxi seguro"
Por:
  • monica-garza

No es necesario ser psiquiatra para saber que vivir con miedo es una de las peores cosas que pueden ocurrirle a un ser humano, que vivirá actuando, en consecuencia, con una seguridad socialmente mermada que terminará por lastimar sus capacidades intelectuales y por ende las productivas.

Así vivimos actualmente millones de mexicanos en nuestras calles y en prácticamente todas nuestras actividades cotidianas, de acuerdo con lo que arrojó la más reciente Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana, la cual señala que la percepción de inseguridad en el país creció 4.1 por ciento el último año.

Las ciudades más afectadas resultaron ser Villahermosa, Coatzacoalcos, Reynosa y Ecatepec y las zonas norte y oriente de la Ciudad de México, que juntas sumarían más de 10 millones de habitantes, de los que sólo 5 de cada 100 consideran que salir a la calle es seguro.

En el caso de las mujeres la encuesta reporta que el 80.3 % se siente inseguro, y ¿cómo no?, si cada día se reporta un caso de feminicidio más estridente que el anterior y a últimas fechas en lo que originalmente se había diseñado como un “servicio de transporte seguro”.

[caption id="attachment_652758" align="aligncenter" width="1068"] Mara Castilla (izq.) fue asesinada por un chofer de Cabify, mientras que Mariana Fuentes (der.) murió en un asalto en el que participó un conductor de Uber.  Foto: Especial[/caption]

En el estado de Puebla primero fue Mara Castilla y la empresa Cabify, luego Mariana Fuentes y la empresa Uber. Una vez más estos transportes privados se vieron involucrados en uno de los 5 feminicidios que diariamente se registran en México.

Desde el año 2015 diferentes entidades han realizado esfuerzos por regular los transportes que se piden a través de aplicaciones móviles. Ese año el gobierno de la Ciudad de México publicó un esquema de regulación donde destacó su registro ante la Secretaría de Movilidad (Semovi), la emisión de un permiso para los operadores, su capacitación y la obligación de contar con un seguro.

Recordemos que dichas medidas se fijaron en aquel entonces ante la molestia y la protesta de prácticamente todos los taxistas que estaban registrados como tal es, que pagaban permisos para transporte público, licencia de chofer, tarjetas de circulación y placas de taxi, gastos que no tiene un chofer de Uber, por ejemplo.

Sin embargo, en aquel momento miles de usuarios alzaron la voz en favor de las redes de transporte privado, argumentando la calidad de su servicio, sobre todo por la seguridad que ofrecían, en la comodidad de un auto último modelo, además de botellitas de agua para el viaje y centro de carga para el teléfono celular.

En abril de 2016, cuando se presentó el Doble Hoy no Circula en el Valle de México —y la demanda por el servicio de taxi creció más de 20 por ciento— la empresa Uber, por ejemplo, se dio el lujo de aumentar sus precios hasta 9.9 veces con sus llamadas “tarifas dinámicas”, donde un usuario llegó a gastar hasta 1400 pesos en un recorrido de 42 kilómetros. Pero todo fuera por la seguridad...

A sólo un año y medio las cosas han cambiado radicalmente. Ya no nos sentimos seguros en Uber, ni en Cabify ni en ningún lugar.

De acuerdo con la Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana, específicamente en el rubro del transporte público, el 74.6% de la población se siente inseguro.

El año pasado los números de esta misma encuesta señalaban que el 53% de los mayores de 18 años se sentía a salvo en un automóvil particular, mientras que el transporte público quedaba clasificado como uno de los espacios más inseguros, pues sólo el 30% de la población confiaba en él.

Actualmente el escenario es prácticamente el mismo en ambos casos.

Y es que existe una cifra negra en cuanto a los incidentes violentos en transporte. De enero de 2015 a julio de 2016 se denunciaron 442 robos con y sin violencia ante la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal, sin detallar si se trata de taxis libres, de sitio, vía radio o a través de plataformas como Uber y Cabify.

En Guadalajara, una de las capitales más avanzadas en términos de “transporte seguro” en el país, de enero a septiembre de este año se han presentado contra Uber y otras plataformas 11 denuncias por agresiones de carácter sexual y dos más en taxis convencionales, según reporta la Fiscalía del estado.

Así que los resultados que arrojó la ultima Encuesta Nacional de Seguridad Pública Urbana en términos de percepción no andan tan alejados de la realidad, porque en México la inseguridad sí es lo que parece, hasta en los “taxis seguros”...