Ojo con la vuelta al pasado

Ojo con la vuelta al pasado
Por:
  • larazon

Pablo Hiriart

De acuerdo con la DEA, El Chapo Guzmán operaba en 200 ciudades de Estados Unidos. La pregunta es obvia: ¿por qué lo permitían?

Para que El Chapo pudiera introducir y distribuir cocaína en esa cantidad de territorio, necesitaba tener una infraestructura logística amplia y sofisticada, aceitada con dinero.

¿No era posible utilizar la alta tecnología de que disponen, para rastrear y cortar esas redes criminales?

Lo que sucede es que los estadounidenses combaten con más ahínco esas mafias afuera de su país que adentro.

Han tenido la habilidad de dejar fuera de Estados Unidos la violencia y quedarse con el dinero del narcotráfico.

Aquí hemos hecho exactamente al revés: nos quedamos con las balaceras y las ejecuciones, con la violencia, y los dólares que genera esa actividad se quedan en Estados Unidos.

Desde luego que hay que perseguir a los capos del narcotráfico porque es un negocio ilícito, y en la disputa por el control de rutas hacia la frontera del norte siembran la muerte y derraman sangre.

Sin embargo el tráfico de estupefacientes va a seguir mientras haya una gran cantidad de consumidores que los demandan del lado estadounidense, con dólares en la mano.

Los encargados de la seguridad en el vecino país, al parecer quieren que la tarea sólo se haga del lado mexicano, para que nos quedemos con los muertos y con el estigma de país violento y corrupto, mientras en la Unión Americana se quedan con los dólares.

De acuerdo con datos de Forbes, las drogas ilegales procedentes de Colombia y México, en 2008, implicaron el blanqueo de entre 18 y 39 mil millones de dólares.

¿Cómo hacen los bancos en Estados Unidos para lavar esa enorme fortuna, cada año, sin que las autoridades encargadas de perseguir ese delito se den cuenta?

Hace un par de años se encontró un eje de lavado de dinero en México y Estados Unidos, que se realizaba en el banco HSBC.

Pero el castigo fue únicamente económico y no se le canceló la licencia para operar, ni mucho menos fueron a la cárcel los ejecutivos de ese banco.

Según la versión estadounidense, el 25 por ciento de todas las drogas que circulan en ese país es abastecido por la organización liderada por El Chapo.

¿Qué han hecho? Sí han dado golpes, pero no se comparan con el enorme esfuerzo que ha hecho México para combatir esa calamidad.

Está muy bien que se haya recapturado al Chapo, sobre todo porque se le restituye la respetabilidad al Estado mexicano.

Pero la prioridad es abatir la violencia en el territorio nacional. Bajar sustancialmente los delitos que afectan el patrimonio y la seguridad de los mexicanos.

Es lo que debe venir, y no una vuelta a la narrativa del sexenio anterior.

phl@3.80.3.65

Twitter: @PabloHiriart