Grito kitsch en el papel

Grito kitsch en el papel
Por:
  • larazon

Ernesto Lozano / http://ernestolozano.artelista.com

El fin de semana pasado se inauguró, en la Galería José María Velasco hasta el 7 de marzo de 2010, la muestra ¡Las Pokiankitsch, al grito de guerra! ¡Que sí, que no, que como chin…gados no!, del colectivo plástico Las Pokiankitsch, integrado por tres inquietas, talentosas y divertidas jóvenes. Esta exposición se presenta en el marco de los festejos por el Centenario y Bicentenario de la Independencia y la Revolución Mexicana.

Integrada por espectaculares arte objeto, nos redescubre las diferentes lecturas que pueden tener las cosas comunes, “quitándole la cáscara de su utilidad efímera para incluirlos dentro del terreno del arte objeto, en un experimento de resignificaciones, en el actual panorama de signos y mitos intrascendentes”.

Estas artistas logran nuevas lecturas, nuevos símbolos, desmarcándose de lo políticamente correcto y convencional. Arriesgan y permiten que los materiales y los objetos se reinventen y desplieguen una amplísima galería de elementos cotidianos, reciclados, que apelan, como toda creación cultural, a la polisemia, y por consecuencia a la osada reinterpretación. Las creaciones de estas singulares artistas son un híbrido de todas las corrientes artísticas, no se encasillan, son kitscht, son pop, o barroco kitsch, pero yo aseguro que son ellas!

La Razón conversó en exclusiva con las Divas del Kitsch.

¿Por qué Las Pokiankitsch? Retomamos el nombre de un caso policíaco, verídico de los años 70, en Lagos de Moreno, tres mujeres tratantes de blancas. Hicimos un juego de palabras y nos salió Las Pokiankitsch, para darle lugar a la corriente estética en que insertamos nuestro trabajo, el Kitsch.

¿Cómo se integran, cuál es su formación profesional? Somos egresadas de la Escuela de Artesanías de Bellas Artes —Eli y Diana egresadas de la carrera en metal y Noemí de la carrera de estampado en todo tipo de material—. Cada una de nosotras tenía sus propios proyectos y sueños, tener un espacio y un taller para crear obra plástica.

Fue muy difícil por lo económico. Teníamos nuestro propio concepto, desarrollábamos nuestros accesorios, pero sólo para nosotras. Nunca encontramos un lugar que dijera “solicitamos escultora en metal”, por lo que empezamos a vender nuestros productos en La Lagunilla, así obteníamos recursos y creábamos nuestra propia obra plástica.

¿Cómo llegan a Las Pokiankitsch al grito de guerra ¡Que sí, que no que cómo chin…gados no!? Ya tenemos un pequeño recorrido, Alfredo Matus, el director de La Galería José María Velasco, se acercó a nuestro colectivo para invitarnos a exponer, aunque ya lo habíamos echo en las vitrinas de esta galería. El primer sueño de tener un taller y esculpir el metal académicamente se fue transformando hasta llegar a lo que desarrollamos en la actualidad; así surge el proyecto de exponer con el tema del Bicentenario.

Llegamos a esta propuesta al buscar una libertad propia, la expresión de libertad de Las Pokiankitsch, poner una monografía e intervenirla como uno quiere, no como te lo dictan en la escuela.

Mucha gente se ha sentido identificada con esto, nosotras no nos proponemos celebrar el Bicentenario, lo cuestionamos: ¿cuál Independencia?, ¿de qué nos ha servido?, por eso asumimos nuestra propia libertad como artistas.

Esta exposición es el buscarle como vamos y pensamos como colectivo. Al mural con las monografías llegamos por el cuestionamiento e investigación; era como recordar cuando íbamos a la escuela y nos pedían las monografías y las chingadas biografías que no aparecían, y comenzaba nuestro peregrinar para encontrarlas.

En la pared de enfrente encontramos la pieza ¡Qué papelón!, que surge producto de una visita al museo del Castillo de Chapultepec. No teníamos ese día los 51 pesos que costaba la entrada para cada una, ni los 13 pesos del carrito parar llegar hasta la instalación. Dejamos entonces la visita para el domingo, que es gratis; la sorpresa fue encontrarnos el cómo vivían nuestros gobernantes, la gente tiene coraje hacia eso. La historia reflejada a través de la peineta de Carlota. Son historias de papel, una gran escenografía.

¿Cómo se comporta el mercado del arte con su obra, existe para ustedes? Existe, pero de oídas. A nosotras no nos ha tocado, seguimos vendiendo en el mercado, pero de la Lagunilla, por eso somos Las Pokiankitsch y su Glamour Callejero. A lo mejor venderíamos en Europa, pero si no teníamos 51 pesos para entrar al Castillo de Chapultepec…

 El arte kitsch. Es aquel que está sobre decorado. Nace del arte popular, también de lo cursi y de lo exagerado. Utiliza elementos pasados de moda.

agp