Slim y Murdoch quieren la F1

Carlos Slim es una apasionado del deporte motor. / Foto Especial

El empresario mexicano Carlos Slim Helú y el magnate australiano Rupert Murdoch quieren el control de la Fórmula Uno. El mundo del automovilismo se cimbró ayer luego de que una versión de Sky News, televisora parte del grupo News Corp, de Murdoch, asegurara que este último buscaría hacer una alianza con el presidente de Grupo Carso para adueñarse del destino del Gran Circo, que actualmente tiene la empresa privada CVC Capital Partners.

Murdoch está en espera del momento oportuno para intentar comprar la F1 y Slim se ha convertido en el socio perfecto; no sólo por ser parte del cuerpo de patrocinadores de la escudería suiza Sauber, donde corre el piloto Sergio Pérez, sino porque es más que conocido el interés de Carlos Slim por el deporte motor. De consumarse la información ambos deberán desembolsar más de mil 800 millones de dólares.

Sin embargo el director ejecutivo de la Fórmula Uno, Bernie Ecclestone, rechazó que la máxima categoría del automovilismo esté en venta, con lo cual quiso acabar con la polémica del supuesto interés que existe por parte de los empresarios.

“La Fórmula Uno no está a la venta, la gente está tocando la puerta todo el tiempo, pero CVC no está interesada en una salida por lo menos en los próximos dos o tres años”, indicó.

A su vez el máximo dirigente de la máxima categoría del deporte motor aseveró que ceder el certamen a un conglomerado de comunicaciones es “poco conveniente”, debido a la negociación de los derechos televisivos donde se transmiten las carreras de F-1.

“De cualquier forma, no venderíamos a una empresa de medios porque restringiría la capacidad para negociar con otras cadenas”.

Cabe destacar que los equipos de la Fórmula Uno mantienen un pacto conocido como Acuerdo de la Concordia, el cual reglamenta las ganancias de las escuderías por los derechos televisivos.

Este acuerdo expira en la temporada 2012 y sería un obstáculo para Murdoch y Slim si pretenden formalizar su oferta por la competencia automovilística.