Doctor sueño: una pasable secuela de El resplandor

Doctor sueño: una pasable secuela de El resplandor
Por:
  • jesus_chavarria

A la sombra de ese portento fílmico entregado por el genial Stanley Kubrick, titulado El Resplandor, Doctor Sueño es una secuela que teniendo nuevamente los escritos de Stephen King como fuente de origen —la novela del mismo nombre se publicó en 2013—, se embarca en la búsqueda de su propio valor e identidad, pero sin negar, en ningún momento la influencia de su predecesora. Por el contrario: se inspira en ella y se asume como un claro homenaje.

Tal pretensión redunda en una manufactura impecable, con un importante peso de la iconografía, pero con directrices distintas en cuanto al tono se refiere, es mucho más reflexiva que sobrecogedora, posee atmósferas casi hipnóticas y el trasfondo emocional necesario para elaborar un retorcido y desencantado relato acerca de la redención.

Te puede interesar: Afrontan la vejez con humor existencialista

Cuenta con el estadounidense Mike Flanagan —Hush (2016)— en los controles. Este nuevo encuentro con el niño (interpretado por Ewan McGregor), quien junto con su madre sobreviviera a la locura en el Hotel Overloock hace 39 años; hoy está consumido por el alcohol y las drogas. En plena rehabilitación entra en contacto con una niña que también posee habilidades psíquicas.

Resulta un punto de partida ideal para lo que habrá de encaminarse a un temible escenario, el gran regalo que la película entrega. Es una lástima que todo venga acompañado de la confrontación con un grupo de seres que no sólo poseen habilidades extraordinarias iguales, sino que han hecho de ellas su modus vivendi; esto en un afán por expandir el universo apuntado en el concepto original, que, así cómo ofrece algunas retorcidas y efectivas secuencias con tintes de gore, también termina por caer en los convencionalismos del género. Cuestión que, aunada a la parsimonia excesiva del desarrollo, provoca que por momentos la cinta alcance los límites de lo intrascendente y no permita que se explote por completo la relación entre los protagonistas.

Así pues, podemos decir que Doctor Sueño cumple a medias con los dos objetivos arriba mencionados, quedando sólo como una secuela aceptable por su impecable acabado visual e interesante por su planteamiento acerca de la brutalidad de la culpa y el significado del sacrificio, pero lejos de la efectividad que pretendía.

Claro, cuenta con un agregado hacia el último tercio, sutil e inquietante, que hará las delicias de cualquier fan, si es que éste es capaz de tenerle paciencia al trayecto.

http://www.youtube.com/watch?v=xWdL90wpWA8