Tenía 104 años

Muere Olivia de Havilland, la última estrella del cine clásico de Hollywood

La actriz del filme "Lo que el viento se llevó" fallece en París, Francia; ganó dos Oscar por "La vida íntima de Julia Norris" y por "La heredera"

La actriz, en un fotograma del filme "Lo que el viento se llevó".
La actriz, en un fotograma del filme "Lo que el viento se llevó".Especial
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La actriz Olivia de Havilland, considerada la última gran estrella del cine clásico de Hollywood y protagonista del filme 2Lo que el viento se llevó", falleció la noche del sábado a los 104 años de edad, en París, Francia, donde vivía desde hace más de seis décadas, dio a conocer a la revista Variety, su antigua abogada Suzelle M. Smith.

“Anoche, el mundo perdió un tesoro internacional, y yo perdí a una amiga. Murió en paz en París”, expresó Smith, se informó este domingo. Además se señaló que falleció por causas naturales. 

Havilland era la última sobreviviente de los protagonistas de la cinta "Lo que el viento se llevó", filme por el que fue nominada al Óscar a Mejor Actriz de reparto por su papel de Melanie Hamilton y con el cual alcanzó reconocimiento internacional.

Era hermana de Joan Fontaine, con quien tuvo una gran rivalidad, que incluso la llevó a enemistarse desde 1975.

La pasión de Havilland por Shakespeare la llevó a interpretar "Sueño de una noche de verano", participación que le abrió las puertas en Hollywood. El director austríaco Max Reinhardt quedó cautivado con su talento como actriz cuando ella tenía 18 años.

En 1941 fue nominada a Mejor Actriz por su trabajo en "Si no amaneciera", pero quien se alzó con la estatuilla fue su hermana Joan Fontaine por "La sospecha", de Alfred Hitchcock.

Ganó dos Oscar por "La vida íntima de Julia Norris", 1946, y por "La heredera", de 1949. Además, realizó 61 películas.

Destacó por ser una férrea defensora de los derechos de los actores, denunció a Warner Bros por contrato abusivo, la sentencia dio lugar a la conocida ley “De Havilland”, que permitió acabar con el estricto control que las productoras ejercían sobre los actores.