Critican casting para comer con el Papa

El sacerdote y activista Alejandro Solalinde Guerra consideró que se están vulnerando los derechos de los indígenas al seleccionar quiénes serán los que participarán en la comida con el Papa Francisco en Chiapas, el próximo 15 de febrero, ya que se debería dar a conocer la metodología de este proceso.

“Cuando fue la visita de Juan Pablo II yo vi personas de la alta sociedad disfrazadas de indígenas, andaban en la Nunciatura; los mismos obispos dan boletitos y te dicen ven disfrazado de indígena. Yo no sé si ahora se realice de esta forma, pero las personas que van a asistir es que tienen muchas palancas del alto clero o del mismo gobierno”, expresó el religioso en entrevista con La Razón.

Destacó que en esta visita no se dará prioridad a las víctimas o a personas que no la están pasando muy bien, “pero ellos (el clero) escogieron a los indígenas, ¿por qué no escogen a los familiares de los 43 normalistas desaparecidos? o a las familias de mujeres que han sido asesinadas, como en Ecatepec”.

El también fundador del albergue de migrantes Hermanos en el Camino consideró que las condiciones en que se dará el encuentro dista de lo que hubiera querido el mismo Jorge Mario Bergoglio.

“Hay que mencionar que se hizo una colecta y los empresarios aportaron dinero, y pues por cortesía se les dan boletos para ver al Papa. Es una lástima esta situación, porque no es como él hubiera querido. Él lo que quería era estar en contacto directo con la gente y con cualquier persona, pero no hay que descartar que el Papa logre reunirse con los normalistas, es decir, encuentros que no estén programado en la agenda ni autorizados por el gobierno ni la Iglesia”, manifestó.

Solalinde destacó que al jerarca católico no le gusta que lo alaben como jefe de Estado Vaticano: “Él viene como un pastor. Yo creo que es la primera vez que nos llega un Papa que está realmente bien informado, porque ha recibido varios reportes de la situación actual del país. No dudo que el nuncio apostólico, Christophe Pierre, lo haya puesto al tanto de la situación”.

Destacó que un punto clave en la visita papal “es la comprensión hacia la ordenación de diáconos que en años anteriores se suspendieron. Sería un punto importante que el Papa viera la maravilla que significa esto y manifestara si va a continuar la ordenación de un diaconado uxorado que consiste en tener esposa e hijos, es una visión completamente diferente del sacerdocio”.

Padres de los 43 ya no quieren reunión

Vocero de familiares asegura que hay decepción con el prelado; le faltó sensibilidad cuando lo buscaron en EU, dice

Por María Cabadas

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Los padres de los 43 normalistas de Ayotzinapa desaparecidos en Iguala, Guerrero, en septiembre del año pasado, no buscarán reunirse con el Papa Francisco durante su visita a México, pues lo califican de “insensible”.

Felipe de la Cruz, vocero de los familiares de los jóvenes, explicó que cuando intentaron reunirse con el pontífice durante su gira por Estados Unidos, éste careció de sensibilidad para acercarse a ellos.

“Nosotros no tenemos ningún interés de reunirnos con el Papa. No hay ningún interés de los padres de familia”, expresó.

De la Cruz aseguró que cuando buscaron tener un encuentro con el jerarca católico, en septiembre pasado, éste ni siquiera hizo el intento de acercarse a los familiares de los normalistas para siquiera brindarles un saludo. Aseguró que esta actitud por parte de Jorge Mario Bergoglio generó descontento entre sus representados.

“Es mentira que estemos buscando algún acercamiento con él”, dijo tras señalar que el Papa careció de la sensibilidad para dirigir unas palabras a las madres, por lo que “hoy no vemos tan relevante el hecho de que venga”.

Agregó que aun cuando entre los familiares de los normalistas existen fervientes católicos “están decepcionados”, por lo que insistió en que no buscarán ningún acercamiento con el Papa. “Que venga a México, bienvenido y que haga su trabajo como él lo sabe hacer”.

El jefe del Estado Vaticano arribará a nuestro país el próximo 12 de febrero y visitará cuatro ciudades: Distrito Federal; Morelia, Michoacán; San Cristóbal de las Casas, Chiapas, y Ciudad Juárez, Chihuahua. El itinerario no incluye Iguala, Guerrero, como solicitaban los obispos de la entidad.