Lenia Batres asume como ministra y abre frente contra SCJN: Hay excesos

Al asumir el cargo de ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), durante su primera sesión como integrante del tribunal pleno, Lenia Batres hizo una fuerte crítica a la máxima instancia de justicia del país, a la que acusó de incurrir en excesos en su actuación, de invadir esferas de competencia y de pasar por encima de la Constitución.

Ante el pleno de ministros e invitados especiales, después de ser investida para ocupar el cargo durante quince años, Batres Guadarrama señaló que el máximo tribunal se ha extralimitado, con determinaciones que han rebasado sus atribuciones y que expresan que no hay una Corte subordinada a la Constitución, sino una Constitución subordinada a la Corte, al grado de, dijo, se escucha entre litigantes decir: “¿Y qué dice la Constitución al respecto? Lo que indique la Suprema Corte”.

En su discurso inusitado por la carga crítica, la décimo quinta ministra en la historia judicial de México advirtió que la Corte no puede seguir tomando “decisiones anticonstitucionales” bajo el argumento de que son inatacables.

“Podrían decir que la Suprema Corte sí es el órgano supremo en el país porque puede anular leyes por mayoría calificada, pero se equivocan, porque si actuara como verdadero tribunal constitucional, no prevalecería la Suprema Corte, sino la Constitución”, manifestó.

“Es cierto que los juicios deben tener una instancia de cierre, pero eso no quiere decir que los acuerdos generales que dicta la Suprema Corte o su jurisprudencia puedan estar por arriba de la Constitución o de las leyes mexicanas. Por eso hablamos de excesos”, expuso.

Expresó su desacuerdo con el actuar del alto tribunal, al suspender normas impugnadas en acciones de inconstitucionalidad y por reactivar leyes derogadas por el Congreso, al invalidar las nuevas.

“Hans Kelsen calificó a los tribunales constitucionales como legisladores negativos, pero la Corte ha asumido una función de legislador positivo, pues define normas que prevalecerán posteriormente a una declaración de inconstitucionalidad, invadiendo la esfera del Poder Legislativo, que fue electo democráticamente”, denunció.

Batres Guadarrama refirió que “en una reflexión seria y mesurada, la Suprema Corte tendría que concluir que debe autolimitarse y someterse a la auténtica jerarquía normativa de nuestro país”.

Arropada por familiares y funcionarios locales y federales vinculados a la Cuarta Transformación, invitados a la sesión solemne, Lenia Batres se presentó como la “ministra del pueblo”.

Dijo que “quien crea que puede ridiculizarme por provenir de este pueblo mexicano, no sabe la fuerza y la grandeza que me está atribuyendo”.

La ministra Lenia Batres Guadarrama manifestó su compromiso de perseguir y defender la equidad de género, de tomar en serio la igualdad y la universalidad de los derechos humanos.

Aseveró que su nombramiento como ministra contribuye a la paridad y marca la presencia en la Corte “de personas tangibles, terrenales y con problemas comunes, al tiempo que representa la llegada de visiones distintas a las predominantes”.

Señaló que “soy producto también de esta época, de nuestra época, que exige a las mujeres perseguir y defender la equidad de género, que nos compromete a tomar en serio la igualdad y la universalidad de los derechos humanos, (...) que obliga a las personas servidoras públicas a responder con respeto y lealtad a la nación”.

En presencia de los plenos de la Corte, del Consejo de la Judicatura Federal y del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, la ministra presidenta Norma Piña entregó a Batres la investidura para que forme parte del pleno en su segunda sala.

La ministra Yasmín Esquivel Mossa, quien a petición de Lenia Batres dio el discurso de bienvenida, destacó que la nueva ministra es “una mujer de ideales que enriquecerá los debates que a la Corte le corresponda analizar”.

Barra de abogados pide honrar la imparcialidad

La Barra Mexicana de Abogados (BMA) envió a Lenia Batres, nueva ministra de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), un mensaje en el cual le solicita alejarse de sus preferencias políticas y desempeñar el cargo con imparcialidad.

En tanto, integrantes de la Marea Rosa se pronunciaron en contra del inicio de funciones de Batres Guadarrama como nueva integrante del alto tribunal del país y reiteraron el llamado a una nueva movilización en “defensa” de la democracia.

“Consideramos que es la ocasión propicia para dar la bienvenida a la ministra Lenia Batres Guadarrama y desearle un ejercicio exitoso como integrante del máximo tribunal de nuestro país, al tiempo de hacer votos para que en su desempeño como jueza constitucional honre la objetividad e imparcialidad, alejada de las preferencias políticas que durante su vida profesional ha respaldado”, dijo en un comunicado el presidente de la BMA, Víctor Oléa Peláez.

Agregó: “Nuestro Colegio espera que, por encima de cualquier visión ideológica o personal, prevalezca siempre el espíritu republicano, el respeto a la división de poderes, así como el ejercicio autónomo de tan elevada responsabilidad”.

Por su parte, el integrante del Frente Cívico Nacional (FCN), Guadalupe Acosta Naranjo, compartió una imagen de Batres Guadarrama al momento de asumir el nuevo cargo en el máximo tribunal del país, a la cual se refirió como una foto que “congela un instante de vergüenza nacional”.

El exdiputado también dijo que la ministra “intentará la colonización de la Corte”. En este contexto, recordó la convocatoria a la marcha que las organizaciones civiles que se agrupan en Unid@s han organizado para el próximo 18 de febrero y que se ha denominado “Movilización Nacional en Defensa de la Democracia y la División de Poderes” a la que, dijo, “no tenemos permitido faltar”.

En tanto, Amado Avendaño, del FCN, criticó el discurso de Lenia Batres ante el pleno y la calificó como “impresentable”.

Compartió una grabación de casi un minuto en el que además de las palabras ofrecidas en la Corte, incluyó el fragmento de un video viralizado semanas atrás en donde se ve a la ministra pelear con unos vecinos y exclamar palabras altisonantes.