Declaran culpable a Harvey Weinstein por agresión sexual y violación

Por la agresión sexual y violación en contra de dos mujeres, un jurado de Nueva York declaró al exproductor de Hollywood Harvey Weinstein culpable.

Casi después de un mes de juicio y cinco días dedicados a deliberar, se halló responsable al cofundador de Miramax por violación en tercer grado de la actriz Jessica Mann y de practicar sexo oral a la exasistente de producción Miim Haleyi.

Sin embargo, no se le imputaron los cargos de depredación sexual y violación en primer grado, que eran los delitos más graves a los que se enfrentaba.

El exproductor de Hollywood puede alcanzar una pena de 25 años de prisión.

Los miembros del jurado indicaron que no encontraron más allá de una duda razonable que Weinstein también había violado a Annabella Sciorra, otra víctima cuyos testimonios utilizaron los fiscales en un intento de establecer el comportamiento depredador del magnate.

El jurado tardó 26 horas en llegar a un veredicto y durante el proceso en contra de Weinstein testificaron la actriz Jessica Mann, quien lo acusó de violarla; y la exasistente de producción Mimi Haleyi, quien declaró que la había obligado a practicarle sexo oral en 2006.

Las primeras acusaciones contra Weinstein ocurrieron en 2017, cuando los diarios estadounidenses The New York Times y The New Yorker publicaron reportajes en el que decenas de mujeres denunciaban que habían sido abusadas sexualmente por el empresario.

Desde esa fecha, hasta ahora, más de 90 mujeres han denunciado a Harvey Weinstein, quien, de acuerdo con las declaraciones de las afectadas, usó el poder que tenía en Hollywood para cometer abusar, violar o acosar.

Tras las acusaciones fue expulsado de la Academia de Hollywood, vendió sus propiedades para financiar su defensa y se divorció de Georgina Chapman.

Tras este juicio, Weinstein enfrentará en nuevo proceso legal en Los Ángeles, donde la Fiscalía presentó cuatro cargos formales contra el productor de cine, de los cuales dos son por agresiones sexuales cometidas presuntamente en febrero de 2013.

Este caso fue el que impulsó la creación del movimiento #MeToo y se convierte el primero en tener una victoria ante la corte de Estados Unidos.

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