Es migrante africana, la denunciante de Strauss-Kahn

Dominique Strauss-Kahn, director del FMI. Foto: AP

Washington.- La mucama que acusó al director del Fondo Monetario Internacional (FMI), Dominique Strauss-Kahn, es una inmigrante del oeste de África de 32 años, madre de un hijo de 15 años, cuya vida fue trastornada por el incidente, dijo hoy su abogado.

“En este momento esta mujer está atemorizada. Fue una persona que la atacó, la violó y aparece en todos los segmentos de televisión. Esta pesadilla sigue reciclándose en su mente. No tiene punto de refugio”, señaló el abogado a la cadena CNN.

Empleada del lujoso hotel Sofitel de Nueva York, donde Strauss-Kahn ocupó una suite de tres mil dólares la noche, la mujer fue descrita por el abogado como una trabajadora “ejemplar” que tenía buenas relaciones tanto con sus superiores como con sus compañeros.

“Se le pidió que fuera a limpiar el cuarto y nunca esperó que (Strauss-Kahn) estaría allí en ese momento”, dijo su representante a la cadena.

El abogado relató que la mujer tuvo que enfrentar un difícil proceso de inmigración a Estados Unidos desde África.

Y ahora “su futuro es muy incierto, porque no sabe qué hará a partir de este momento”, señaló el abogado al comentar que la mujer no ha podido regresar a su casa desde el incidente registrado el pasado sábado.

Strauss-Kahn cumplía este martes su primer día completo en la prisión de Rikers Island, donde por orden de una jueza deberá estar hasta su siguiente comparecencia en la corte el 20 de mayo por cargos de abuso sexual.

Sus comidas son servidas dentro de la celda y tiene una hora de recreación en la que puede salir.

Strauss-Kahn, quien se declaró no culpable, enfrenta los cargos de acto sexual delictivo en primer grado, retención de libertad en segundo grado, intento de violación de primer grado y abuso sexual en primero y tercer grado.

El FMI, quien designó al número dos John Lipsky como director interino, señaló que sigue el caso pero no hará más comentarios.

jcs