Por Brexit, Johnson ya se juega el cargo

El primer ministro británico, Boris Johnson, puso su cargo en riesgo, al suspender a “la madre de todos los parlamentos” para evitar cualquier impedimento para sacar a Reino Unido de la Unión Europea, sin un acuerdo, el próximo 31 de octubre. Aun con el aval de la reina, quien lo autorizó el pasado miércoles, el llamado Trump europeo está expuesto a los recursos legales en su contra, con los que varios grupos intentan evitar que actúe con ánimo de “dictador”.

Un Parlamento que no sesiona no puede abordar asuntos oficiales y, por lo tanto, no podrá concertar medidas para impedirle consumar un Brexit sin acuerdo que cortaría bruscamente los lazos con la Unión Europea.

Johnson tenía plena conciencia de que al pedir a Isabel II que suspenda el Parlamento provocaría quejas por un posible golpe antidemocrático. Pero si es capaz de cumplir su promesa frecuente de salir de la UE el 31 de octubre, se le recordará como el líder que hizo realidad el resultado del referendo de 2016.

“Si resulta, muchos dirán que fue una muestra brillante de teatro y liderazgo político”, dijo a la agencia AP el historiador Anthony Seldon, de la Universidad de Buckingham. “Y si no, significará probablemente el fin de su mandato”.

Johnson apuesta a que el impulso político superará el costo económico, a pesar de las sombrías advertencias de empresarios influyentes y economistas de que una ruptura brusca de los lazos europeos hundirá al país en una recesión prolongada con pérdida de empleos y caída del poder adquisitivo.

Su predecesora ,Theresa May, no estuvo dispuesta a dar ese paso. Llegó varias veces al borde y dio un paso atrás, y logró una extensión del plazo antes que salir sin un acuerdo.

Pero si falla, Johnson bien podría encontrarse ante una elección general que pondría en peligro su liderazgo en el Partido Conservador o ante un Parlamento resuelto a bloquear su plan del Brexit e imponer su voluntad en un choque político a gran escala.

“Faltando apenas 63 días para el plazo del 31 de octubre, un primer ministro no elegido no rendirá cuentas a los parlamentarios durante cinco semanas. Además de negar a votantes la última palabra, Boris Johnson acalla a sus representantes”

The Independent

29 de agosto de 2019

Aun en ese caso, dijo Seldon, Johnson podría quedar en buena posición en una elección porque podría acusar al Parlamento de contrariar la voluntad popular al imposibilitar el Brexit, apoyado por la mayoría en el referendo.

Previsiblemente, la decisión del primer ministro recibió la condena de los diarios británicos que se oponen enérgicamente a la salida sin acuerdo. El Independent publicó que Johnson emplea medios “tortuosos” para socavar las instituciones democráticas.

“Con apenas 63 días para el plazo del 31 de octubre, un primer ministro no elegido no rendirá cuentas a los parlamentarios durante cinco semanas. Además de negar a los votantes la última palabra, Boris Johnson acalla a sus representantes”.

El margen de maniobra es muy estrecho. No fue electo y su partido, que no tiene mayoría en la Cámara de los Comunes, debe confiar en los votos de un pequeño partido de Irlanda del Norte para aprobar sus iniciativas.

Scott Ainslie, un miembro inglés del Parlamento Europeo con el Partido Verde, dijo que la táctica provocadora de Johnson podría impulsar a la oposición a encontrar rápidamente la manera de evitar un  sin acuerdo.

“Todos los demás partidos deben organizarse ahora en este momento de inflexión de la historia y unirse para detener este gobierno desastroso”, dijo Ainslie.

Además, comentó, la suspensión del Parlamento es una maniobra “desesperada” que podría representar el “último estertor” del Partido Conservador.

La próxima elección general en Gran Bretaña está prevista para 2022, pero se podría adelantar si Boris Johnson pierde un voto de confianza en el Parlamento o decide convocarla él mismo para tratar de ganar la mayoría.

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