Kremlin mantiene ataques sobre territorio ucraniano

Rusia arrecia estrategia y reclutamiento forzado

Invasores rusos refuerzan la estrategia de que luchan contra “terroristas”, ante recientes ataques en Donetsk y Belgorod.

Líderes prorrusos investigan un ataque con misil en la región del Donbás, ayer.
Líderes prorrusos investigan un ataque con misil en la región del Donbás, ayer.Foto: AP
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Invasores rusos refuerzan la estrategia de que luchan contra “terroristas”, ante recientes ataques en Donetsk y Belgorod.

Soldados del régimen de Vladimir Putin investigan dos bombardeos luego de que ayer la sede de fuerzas prorrusas en el Donbás, Ucrania, e instalaciones del otro lado de la frontera fueran golpeadas con misiles, hecho que se suma al expediente por el atentado en una base de entrenamiento, luego de que dos sujetos mataran a 11 reservistas el pasado 15 de octubre.

Sin pruebas de que en los hechos participaron fuerzas de Kiev, el Kremlin mantiene los embates sobre territorio ucraniano. Incluso en el episodio del fin de semana las pistas sólo apuntan a que los perpetradores son soviéticos.

Al respecto, los defensores acusan que cada acto contra Rusia, ya sea de Ucrania o por sabotaje, sólo es una excusa para bombardearlos al ver que pierden terreno, pues el mandatario local, Volodimir Zelenski, resaltó nuevos avances en Jerson.

En tanto, fuentes de inteligencia advirtieron que podría tratarse de otra táctica para contraatacar con apoyo bielorruso, pues hay hasta ocho mil militares en la frontera. Además, Moscú mantiene apoyo de Irán, que le sigue suministrando armas a casi ocho meses de la invasión.

Pero no son las únicas revelaciones, pues se descubrieron más crímenes de guerra en el sur, donde los ocupantes asesinaron al director de la Filarmónica de Jerson, Yuri Kerpatenko, presuntamente por negarse a dar un concierto para los rusos.

Más tarde, se reveló que el ejército ruso recurre a tácticas de persecución tipo cacería para garantizar el reclutamiento solicitado por Putin y así tapar las bajas sufridas, pues intercepta a hombres en las calles y hasta en sus trabajos, de acuerdo con el diario The Washington Post.

Esta información expone la fallida estrategia para reforzar a las tropas rusas con miras a sumar a 300 mil reservistas, mientras acumula bajas en territorio invadido, pues según el Ministerio de Defensa local por cada ucraniano muerto se registran hasta 6.5 bajas de ocupantes en los últimos días tan sólo en Jerson, zona que los rusos se apropiaron por decreto a inicios de mes.