Tiroteo en base naval de Washington: 13 muertos

Tiroteo en base naval de Washington: 13 muertos
Por:
  • larazon

Fotos AP

La capital de Estados Unidos, Washington, fue invadida por la conmoción.

Sirenas de ambulancias y patrullas y el vuelo de helicópteros lanzaron la alerta... Eran aproximadamente las 8:20 de la mañana cuando un hombre vestido con uniforme militar y armado con un rifle de asalto y una pistola comenzó a disparar en el edificio 197 —Mando de Operaciones de la Armada— de la base Navy Yard. El tiroteo dejó como saldo 13 muertos, incluido el asesino, y al menos 10 lesionados.

La jefa de la policía de Washington, Cathy Lanier, brindó una conferencia de prensa conjunta con el alcalde de la ciudad, Vincent Gray, en la que confirmaron el número de víctimas.

Los primeros informes eran confusos. Se hablaba de lesionados y varios muertos, pero no se especificaba el número de víctimas. Los primeros tres lesionados —dos mujeres empleadas de la base naval y un policía del área— fueron evacuados en helicópteros y los hospitales de la zona fueron alertados de que tenían heridos de bala en camino.

También los agentes andaban tras la pista de otros dos posibles implicados, un hombre blanco y otro negro de entre 40 y 50 años; sin embargo, horas después, el primero fue absuelto de sospechas. El tirador abatido fue identificado como Aaron Alexis, de 34 años, un antiguo empleado de la marina estadounidense que residía en Texas.

El incidente ocurre tres semanas después de que Nidal Malik Hasan, un psiquiatra militar, fuera condenado a pena de muerte tras ser hallado culpable del mayor ataque contra un centro del Ejército, sucedido en noviembre de 2009, cuando mató a 13 personas.

Las primeras versiones señalan que el hombre comenzó a disparar desde un balcón del cuarto piso del edificio hacia la cafetería, ubicada en el primer nivel.

Patricia Ward, una empleada del complejo, comentó que ella había terminado de pagar un desayuno cuando se inició el tiroteo.“Estaba esperando a un amigo cuando escuché disparos. Fueron tres seguidos. Unos segundos después fueron otros tres balazos”, platicó. De acuerdo con Ward un guardia gritó que escaparan lo más rápido posible.

Por el momento no resulta claro cómo el o los atacantes pudieron ingresar con armas pesadas a un complejo fuertemente protegido como el Washington Navy Yard. No obstante la trabajadora añadió que los empleados no pasan por un detector de metales cuando ingresan al edificio.

Las autoridades tampoco han logrado esclarecer si el tiroteo había sido un ataque terrorista; empero se tomaron medidas de seguridad: el aeropuerto Ronald Reagan fue cerrado temporalmente para permitir el vuelo libre de los helicópteros de la policía y el FBI; también seis escuelas cercanas a la zona fueron cerradas y el Senado —a dos kilómetros del lugar del incidente— suspendió actividades. La seguridad en la Casa Blanca —situada a cinco kilómetros del centro naval— y el Pentágono también fue reforzada, a pesar de que no había una amenaza concreta.

“La familia de la marina sufrió un golpe increíble y horroroso”, expresó Ray Mabus, secretario de Marina.

En tanto el presidente Barack Obama, durante un acto por el quinto aniversario del inicio de la crisis por el hundimiento de Lehman Brothers, condenó el tiroteo y lo calificó como un acto cobarde.

El mandatario, quien no sabía los detalles del incidente, aseveró que se trataba de otro tiroteo de masas. “Sabemos que varias personas resultaron heridas y algunas murieron. Son patriotas que conocen los riesgos de servir a su país fuera. Y sin embargo se enfrentaron a lo inimaginable: una violencia que no deberían sufrir en casa”, manifestó.

La de ayer es la mayor pérdida de vidas humanas sucedida en la capital de Estados Unidos desde que en 1982 un avión se estrelló contra el río Potomac y dejó 78 muertos.

El mayor ataque en sede del Ejército

El 5 de noviembre de 2009 Nidal Malik Hasan, en plena ceremonia de graduación de militares en la base de Fort Hood, en Texas, asesinó a 13 personas y lesionó a 30 tras abrir fuego contra sus compañeros y las familias de éstos. Su justificación para disparar: tratar de establecer el islam, la que considera la religión perfecta.

En un principio se informó que Hasan había muerto, pero finalmente se confirmó que el psiquiatra no había fallecido. El 28 de agosto de 2013 Malik Hasan fue condenado a pena de muerte al ser hallado culpable de 45 cargos, entre ellos homicidio.