Emma Coronel en libertad

Emma Coronel, esposa de Joaquín El Chapo Guzmán y madre de sus dos pequeñas hijas, ha recibido sentencia en Estados Unidos. Permanecerá 36 meses en prisión acusada de narcotráfico.

Coronel, de 31 años, quedará en libertad antes de 2024, después de haberse declarado culpable de tres cargos por narcotráfico en ese país después de pagar una fianza.

Emma Coronel, esposa del fundador del Cártel de Sinaloa pasará los próximos tres años aislada en una prisión de Estados Unidos. El juez del Distrito de Columbia, Rudolph Contreras le ha impuesto este martes una condena de prisión por tráfico de drogas y lavado de dinero. La sentencia no ha sido una sorpresa, pues Coronel fue señalada por los fiscales como una participante menor en el tema de narcotráfico.

Durante el juicio de su esposo en la corte de Nueva York, Emma se mostró siempre como una esposa solidaria y leal. En alguna ocasión vistió un saco color vino a juego con el de El Chapo como símbolo de solidaridad, y el narcotraficante en alguna ocasión, también durante el juicio, le mandó un beso a su esposa.

En medio de este juicio, Emma incluso llegó a escuchar testimonios de las amantes de su marido como la llamada chapodiputada, quien testificó en contra del capo. Ahí siguió apoyando a uno de los más famosos narcotraficantes.

Pasó el tiempo, Joaquín Guzmán Loera fue sentenciado a cadena perpetua, Emma se dedicó a hacer un programa de televisión donde se mostraba la vida de varias parejas de famosos criminales, subía fotos a sus redes sociales y no mantuvo un bajo perfil.

Incluso, pasaba largas temporadas en Estados Unidos, (ella es ciudadana estadounidense), porque aseguran ya no se sentía segura en Sinaloa, muchos enemigos de El Chapo, podrían atentar contra ella o sus hijas.

Ayer, Emma Coronel, acostumbrada a ropa fina y zapatos de tacón, llegó a su audiencia y con grilletes en los tobillos, más delgada y pálida, escuchó los cargos que le imputa el Departamento de Justicia de EU.

Coronel tuvo derecho a hablar antes del dictamen de sentencia, momento que aprovechó para pedir clemencia al juez de poder regresar con sus gemelas.

Los fiscales de Estados Unidos buscaban que Coronel fuera sentenciada a 48 meses de prisión bajo el argumento de que era sólo un engranaje en el Cártel de Sinaloa. Contreras, sin embargo, dictó una condena más reducida, de la cual serán tomados en cuenta los nueve meses que lleva en la cárcel. La esposa de Guzmán Loera podría quedar en libertad en enero de 2024 o antes si presenta buena conducta.

Para llegar a una condena tan reducida como ésta, sin duda Coronel llegó a un acuerdo y está trabajando como testigo protegido. Ya no tiene nada que perder porque es casi imposible que El Chapo salga libre. Aunque sus abogados han pedido que se reduzca la condena, todo indica que Guzmán Loera permanecerá el resto de sus días en prisión.

Y es que antes de conocer el fallo judicial, se dijo que Coronel habría llegado a un acuerdo para obtener una reducción de condena. Los señalamientos fueron negados por la defensa de la mujer presidida por Jeffrey Lichtman y Mariel Colon. De hecho, Lichtman trató de desmontar los rumores diciendo que Coronel no sabía nada del funcionamiento del Cártel de Sinaloa.

Libra condena larga

Emma Coronel tenía apenas 17 años cuando conoció al capo. Desde entonces aprendió a vivir con él, siempre a salto de mata, escondiéndose.

Cuando lo hacían en la sierra, él se sentía cómodo, ella no. Tuvieron unas gemelitas y, según cuentan algunos de los agentes que estuvieron en la detención de Guzmán Loera, lo único que le preocupaba al narcotraficante era el bienestar de su esposa e hijas.

Pasaron los años, detuvieron a Joaquín, y Emma estuvo entrando y saliendo de Estados Unidos. Ahí estuvo durante todo el juicio.

Coronel nunca imaginó que sería detenida. Al ser detenida y en su audiencia, se declaró culpable de liderar el Cártel de Sinaloa junto con su esposo Joaquín El Chapo Guzmán.

También reconoció que ayudó al capo a fugarse del penal del Altiplano, Estado de México, el 11 de julio de 2015, tras su segunda captura.

Al principio se dijo que en el supuesto acuerdo de culpabilidad no tendría que cooperar con las autoridades estadounidenses ni proporcionar información sobre los aliados, socios comerciales o parientes de su esposo.

Por el cargo inicial de asociación ilícita que se le imputó, enfrentaba entre 10 años y cadena perpetua.

Finalmente llegó a un acuerdo con el gobierno estadounidense, y así es como se le dio una sentencia reducida.

Desde su detención, su defensa acusó que la esposa de El Chapo estaba presa bajo condiciones insalubres, que sólo le permitían bañarse en la madrugada, que padecía frío, que dormía en una colchoneta y que sólo tenía permitida una hora al aire libre, sola.

Es inusual que la justicia vaya tras cónyuges de los narcotraficantes, pero los fiscales del mismo juicio de Guzmán Loera presentaron evidencia sustancial de que Coronel Aispuro, a diferencia de otras esposas, estaba implicada en el negocio criminal de su marido.

Los señalamientos en contra de Emma Coronel que se utilizaron fueron declaraciones de narcotraficantes que, para obtener un beneficio ante la justicia de la Unión Americana, se convirtieron en testigos protegidos, principalmente Dámaso López, El Licenciado, un hombre cercano a El Chapo Guzmán. Es más, el más cercano y compadre del capo.

Paradójicamente, dos días después de la detención de Emma, la sentencia para Dámaso López Núñez se redujo, según consta en la base de datos del Buró Federal de Prisiones de Estados Unidos, donde se establece que la fecha de liberación de El Licenciado será el 8 de noviembre de 2032, dentro de 14 años. Permanece en un centro penitenciario de máxima seguridad en el estado de Pensilvania.

Las historias de los narcotraficantes nunca terminan bien. Hoy, Emma Coronel enfrentará poco más de tres años en una cárcel, una condena muy benévola para las acusaciones que tuvo.

Lo cierto es que una vez que quede en libertad, Emma Coronel difícilmente podrá estar tranquila, los enemigos que ha acumulado en estos años son peligrosos y rencorosos.