Fuerza Nico

Es en esta última sensación, de cuando el tiempo se alarga casi infinitamente, en donde quiero detenerme. Cuando el equipo que defiende un gol de ventaja en la final del torneo más importante de sus vidas mira de reojo al árbitro asistente y éste anuncia “3 minutos más de juego”, el tiempo se vuelve pesado, denso, las piernas pesan y se vuelven torpes. Esos 90 segundos que agregó el árbitro se transforman en 90 horas para los jugadores que defienden el gol del campeonato.

Seguramente esa sensación sobre el tiempo tiene hoy Nicolás Castillo, el atacante americanista, quien hoy vive momentos de angustia e incertidumbre por la complicación inesperada en su proceso de recuperación y por la cual tuvo que ser hospitalizado nuevamente en terapia intensiva. Los días y noches parecen interminables cuando se está en una situación así, y parece imposible encontrar respuesta a los cuestionamientos que nacen cada segundo.

Pero dicen que Dios obra de manera misteriosa, y a veces para mirar es necesario no ver; para reír es necesario llorar; para encontrarse hay que sentirse completamente abandonado;  para conseguir  viajar a los lugares más maravillosos y especiales del Universo es necesario estar inmóvil. Y este viaje que emprendió Nico será único y de él vendrán enseñanzas que ahora le permitirán mirar con otro enfoque la vida y obtener el don de disfrutar de los regalos más hermosos que nos da la vida, esos que son imperceptibles para los ojos, pero encontramos cada segundo alrededor de nosotros. Esos presentes son caricias que hacen que el alma sonría y sólo con el tiempo uno logra descubrirlos y por eso el tiempo a veces se hace muy largo, nos da esa oportunidad única para entender.

El camino no es nunca nada sencillo, y habrá otras caídas antes de conseguirlo; pero una de las grandes cualidades de Nico Castillo dentro de la cancha de futbol ha sido su espíritu guerrero y la manera de encontrarse con los goles aun cuando el escenario no pinta nada favorable. No está solo, y ése fue el mensaje que el andino mandó a través de sus redes sociales cuando compartió un video de su cumpleaños número 27 el pasado 14 de febrero; un breve, pero emotivo video desde su cama en el hospital, rodeado de sus seres queridos, con el apoyo y amor incondicional de su pequeño hijo.

Éste es el partido más importante en la carrera de Nicolás Castillo y seguramente el goleador saldrá adelante.