Cambio climático

Cambio climático
Por:
  • jacqueline tapia

El cambio climático es una variación que se da en el clima del planeta, generado por la acción del ser humano. Es decir, por la responsabilidad de las personas, de sus negocios, de sus decisiones, de sus costumbres.

Para decirlo claro, el cambio climático no se da nomás porque sí;  nuestra intervención ha sido definitoria y esto afecta nuestras vidas y seguirlo negando o minimizando está afectando también nuestro presente.

Sólo basta ver una de las crisis más graves que hemos vivido en los últimos tiempos con los  incendios en Australia y que, según Chris Dickman, experto en biodiversidad australiana de la Universidad de Sídney, calcula que sólo en los tres millones de hectáreas que se han quemado recientemente en Nuevo Gales del Sur, es probable que hasta 480 millones de mamíferos, reptiles y aves hayan resultado afectados, y así es que cientos de emus, canguros, koalas y marsupiales han sido afectados, pues es en su  hábitat natural en donde se han concentrado estos incendios.

Hoy hablar de cambio climático es un tema que nos acoge a todas las personas, y que sin duda ha tomado una relevancia en los últimos meses. Una de las principales promotoras ha sido  Greta Thunberg; con sus fuertes declaraciones, la joven activista mediombientalista, nacida en Suecia,  ha denunciado la negligencia y omisión de empresas y  gobiernos al carecer de una verdadera voluntad y querer dejar para otras generaciones las decisiones, pero el destino nos ha alcanzado.

Ante estas realidades, los gobiernos deben modificar la forma en que permiten el uso del agua, la generación de energías, el uso de pastizales y la explotación en general de recursos materiales. Por lo pronto,  el Gobierno de la Ciudad de México  ha tomado una medida que ya entró  en vigor a partir de este 1 de enero: la prohibición del uso de bolsas de plástico de un solo uso y la multa ante el desacato no será sobre la personas que las utilicen, sino sobre las empresas que las vendan o entreguen.

Las sanciones entrarán en vigor a partir del 15 de enero, ya que, como dijo la Jefa de Gobierno, Claudia Sheinbaum, el objetivo “es educar antes de empezar a sancionar” , y aunque las personas no seremos multadas por usarlas,  esto no nos exime de la corresponsabilidad por solicitarlas o aceptarlas.

Y es que cuando se conocen los datos sobre las bolsas de plástico —que son escalofriantes— es que uno puede ir creando consciencia. Por ejemplo, resulta que el plástico se creó para “durar” y esta permanencia incluso perdura cuando se desintegra,  ya que lo hace dividiéndose en pequeñas partículas que al mezclarse con el entorno tardan miles de años en desintegrarse totalmente; además de que muchas terminan en el mar y ahí son afectadas las especies animales, que en muchos casos terminan muriendo.

No es menor esta acción de dejar de usarlas, verdaderamente no tenemos por qué depender  de las bolsas de plástico; no dudo de que habrá circunstancias en las que son indispensables, pero para guardar el pan, las latas, las verduras y los desodorantes podemos usar bolsas de tela, cajas ,o si son pocas,  pues así,  cargándolas con nuestra manitas.