Los regaños de Novelo

Los regaños de Novelo
Por:
  • mauricio_flores

José Novelo está molesto con la industria a la que regula. Al presidente de la Comisión Federal de Prevención de Riesgos Sanitarios no le gustó que se hiciera pública la minuta de trabajo de la reunión —que le dimos a conocer aquí, hace dos semanas— de 16 representantes empresariales con el jefe de la Oficina de la Presidencia, Alfonso Romo, por lo que el viernes pasado trascendió que le metió tremenda regañada a los directivos empresariales en una sesión donde se intentó reactivar el llamado Comité de Moléculas Nuevas.

Dicho Comité es fundamental para la innovación de medicamentos, tanto para el registro de nuevas patentes como para continuar con la exitosa política de producción de genéricos intercambiables; y sólo la investigación clínica de esos bienes podría generar inversiones adicionales de 2 mil millones de dólares en los próximos 5 años. Sin embargo, dicho Comité suspendió sus actividades desde el inicio del actual gobierno. En la reunión de la semana pasada, a la que asistieron ejecutivos de la Cámara Nacional de la Industria Farmacéutica, de  Rafael Gual, y de la Asociación Mexicana de la Industria de Investigación Farmacéutica, de  Ana Longoria, el jefe de la Cofepris acusó a las empresas de ser las que provocan el rezago en el registro de productos innovadores —como sí la industria no supiera cómo efectuar los trámites luego de casi dos décadas de estarlo haciendo— y que se suma a los varios miles de trámites de permiso y registro que siguen varados desde febrero pasado en dicha Comisión.Pero para ninguno de los regañados es secreto que la molestia es que en la reunión del 31 de julio pasado, los empresarios mostraron ante Romo que la Cofepris ha perdido funcionalidad como entidad reguladora, básicamente porque se redujo notablemente la interlocución y se dejaron vacíos relevantes en el organigrama de funcionarios públicos encargados de los procesos. Pero en lugar de retomar rápidamente los trabajos, al parecer lo que se ha puesto al día son los jalones de orejas.

Pero le comen en mandado. Y en tanto el presidente de la Cofepris está más ocupado en hacer corajinas por “que se lo brincan” en la oficina presidencial, la industria de alimentos y bebidas lo está rebasando en la definición de la Norma Oficial Mexicana 051, referente al etiquetado frontal nutrimental. Vaya, tanto la Conmexico, que lleva Jaime Zabludovsky, y la ANPRAC, a cargo de Jorge Terrazas, hacen ya sus propuestas en otras instancias federales (inclusive una campaña de educación) que no necesariamente se ajustan a los intereses de los consumidores. Pero mientras siga la cerrazón en esa Comisión, le seguirán comiendo el mandado a Novelo.

GAP, ahí viene la plaga. El Aeropuerto Internacional de Guadalajara padece en esta temporada un serio problema: una plaga de moscos que pulula todas las tardes dentro y fuera del aeropuerto más importante que opera el Grupo Aeroportuario del Pacífico, que dirige Raúl Revueltas. Las aguas negras que circundan el aeropuerto tapatío son el hábitat de millones de esos insectos que no sólo son una molestia para los viajeros sino una fuente de enfermedades, como el dengue en diversas variantes.  El Organismo Operador del Sistema de Agua Potable y Alcantarillado de Jalisco, a cargo de Bruno Chávez, al parecer no se ha dado por enterado de la problemática.