Si quieres adelgazar, no utilices sustitutos de azúcar

Los métodos para bajar de peso rápido, en muchas ocasiones suelen ser cuestionables porque muchos de ellos lo primero que te piden es que cambies el azúcar estándar por sustitutos que, supuestamente, te ayudan a que pierdas kilos en menos tiempo. 

Ante este tipo de situaciones, siempre es importante que valores antes que cualquier otra cosa tu salud y que procures acudir con un especialista para que cheque primero un plan de alimentación que te pueda ayudar a bajar de peso de manera saludable. En este sentido, la Organización Mundial de la Salud refiere que los sustitutos del azúcar, para que adelgaces, no son buenos y te contamos por qué. 

¿Por qué no es recomendado por la OMS usar sustitutos de azúcar?

Según la OMS, luego de una revisión sistemática de las pruebas disponibles, sugiere que el uso de edulcorantes no azucarados o sustitutos de azúcar, "no confiere ningún beneficio a largo plazo en la reducción de la grasa corporal en adultos o niños" y que podría haber "posibles efectos indeseables" a largo plazo, tras el consumo. 

Indican que el usar sustitutos de azúcar suponen un mayor riesgo de padecer diabetes tipo 2 y también enfermedades cardiovasculares. "Sustituir los azúcares libres por estos sustitutos de azúcar, no ayuda a controlar el peso a largo plazo. Las personas deben considerar otras formas de reducir la ingesta de azúcares libres, como consumir alimentos con azúcares naturales, como la fruta, o alimentos y bebidas no azucaradas", refiere el director de Nutrición y Seguridad Alimentaria de la OMS, Francesco Branca, en palabras citadas por CNN.

"Los sustitutos de azúcar no son factores dietéticos esenciales y no tienen valor nutricional. La gente debería reducir totalmente el dulzor de la dieta, empezando pronto, para mejorar su salud", informaron. 

Se hicieron más de 280 estudios

En la revisión que incluyó 283 estudios, la OMS dijo que la recomendación incluye edulcorantes sintéticos bajos en calorías o sin calorías y extractos naturales, que pueden estar o no modificados químicamente, como el acesulfamo K, el aspartamo, el advantamo, los ciclamatos, el neotamo, la sacarina, la sucralosa, la estevia y los derivados de la estevia.