Baja de costos de gasolinas, el alivio

Aumento de precios en EU se desacelera a 8.5% en el mes de julio

IPC se mantuvo sin cambio respecto a junio, reportó el Departamento del Trabajo; el dato anual fue mayor al 8.15% registrado en México; alimentos continuaron al alza

Aumento de precios en EU se desacelera a 8.5% en el mes de julio

La inflación en Estados Unidos se desaceleró a 8.5 por ciento en julio de este año, desde el 9.1 por ciento en junio, que fue la más alta en 40 años, y resultó por debajo de las expectativas del mercado, beneficiada por la disminución de los precios de las gasolinas.

No obstante, el dato de la inflación en Estados Unidos resultó mayor que el de México por séptimo mes consecutivo, la cual fue de 8.15 por ciento en julio pasado.

Los precios al consumidor de Estados Unidos no subieron en el mes de julio gracias a una fuerte caída del costo de la gasolina, en una primera señal de notable alivio para los estadounidenses que han visto acelerarse la inflación en los últimos años.

El Índice de Precios al Consumidor (IPC) se mantuvo sin cambios el mes pasado después de haber subido 1.3 por ciento en junio, detalló ayer el Departamento de Trabajo en un informe muy esperado que, sin embargo, mostró que las presiones subyacentes siguen siendo altas cuando la Reserva Federal (Fed) evalúa si volver a elevar con fuerza las tasas de interés en septiembre próximo.

Economistas encuestados por Reuters esperaban un aumento del 0.2 por ciento en el IPC mensual en julio, luego de una caída de alrededor del 20 por ciento en el costo de la gasolina.

Los precios en las gasolineras se habían disparado en la primera mitad de este año debido a la guerra en Ucrania, alcanzando un récord, en promedio, de más de cinco dólares por galón a mediados de junio, según el grupo de defensa de automovilistas AAA.

Sin embargo, la Fed ha indicado que se necesitarán varios descensos mensuales del crecimiento del IPC antes de que cese el endurecimiento de la política monetaria cada vez más agresivo que ha aplicado para controlar la inflación, que actualmente se encuentra en máximos de cuatro décadas.

Los precios al consumidor en Estados Unidos han aumentado debido a una serie de factores, incluidos los problemas de las cadenas de suministro globales, el estímulo gubernamental masivo del comienzo de la pandemia de Covid-19 y la invasión a Ucrania por parte de Rusia.

Los alimentos son un componente del IPC que se mantuvo al alza en julio, con un aumento del 1.1 por ciento después de la subida de 1.0 por ciento en junio.

Así, la inflación anual en Estados Unidos fue de 8.5 por ciento en julio de 2022, menos que el 8.7 por ciento esperado por el mercado, tras un incremento del 9.1 por ciento en junio. Las presiones inflacionarias subyacentes, que excluyen los componentes volátiles de alimentos y energía, también mostraron algunas señales alentadoras.

Gráfico

El denominado IPC subyacente subió 0.3 por ciento en el séptimo mes del año tras haber ganado 0.7 por ciento en junio, pero avanzó 5.9 por ciento en los 12 meses a julio, al mismo ritmo que en junio.

El costo del alquiler y el alquiler equivalente de la residencia principal de los propietarios, que es lo que un propietario recibiría por alquilar una casa, se mantuvieron casi estables el mes pasado. Los costos de vivienda comprenden alrededor del 40 por ciento de la medida básica del IPC.

Grupo Financiero Monex comentó que, con el dato de la inflación de julio en Estados Unidos, los mercados comienzan a abrazar la idea de que se ha alcanzado un punto de inflexión en materia de precios, pues los energéticos y otros commodities han continuado descendiendo en los primeros días de agosto.

Si la tendencia se consolida y se mantiene por un tiempo, es probable que también sea un catalizador para la política monetaria y eleva la posibilidad de que se reduzca el ritmo de incrementos en la tasa de interés, aunque todavía es pronto para concluir que el dato incidirá en la decisión que anuncie la Fed el 21 se septiembre, agregó en un análisis.

El especialista apuntó que se mantiene en 8.5 por ciento la estimación de inflación para Estados Unidos al cierre del año, pero no se descartan revisiones, dependiendo de la evolución de los precios de los energéticos y de los alimentos.

Así, en un escenario más optimista, donde el precio de la gasolina se mantenga sin cambios, la inflación cerraría en 6.5 por ciento, pero en un escenario adverso, podrán llegar hasta 10 por ciento, pues continúa la guerra entre Rusia y Ucrania, las disrupciones en las cadenas de suministro y el exceso de liquidez global, lo que puede generar precios en lo que resta de 2022.

Recesión nacional durará cerca de tres trimestres

La economía mexicana entrará en una recesión leve a finales de año, tanto en intensidad como en duración, de entre dos y tres trimestres, estimó la operadora de fondos de inversión Franklin Templeton.

La Gestora de Cartera Senior de Franklin Templeton México, Nadia Montes de Oca, señaló que normalmente las recesiones tienden a durar 11 meses, pero en el caso de la economía mexicana se prevé que abarque entre seis y nueve, y el impacto no será demasiado intenso.

En el webinar: ¿Recesión sin recesión?, precisó que dada la estrecha relación comercial de México con Estados Unidos, cuando ese país entre en recesión también, aquí pegará más fuerte, ya que nuestra economía no está “tan sana”.

Respecto al impacto de la recesión de Estados Unidos en México, dijo que depende de la debilidad que registre la parte manufacturera automotriz, que es la que más conecta a ambos países, “cuando esta parte se debilite, probablemente se vea en un par de meses la baja en México”, precisó Montes de Oca.

Con información de Ivonne Martínez