Debilidad en empleo

José Manuel Herrera.

En los primeros seis meses de la actual administración, el número de empleos formales generados ascendió a 59,966, una cifra inferior a la registrada en el periodo similar del gobierno de Felipe Calderón.

Al parecer el equipo del gobierno en turno no puede resistir la tentación de presumir sus “logros” en materia económica y particularmente en la generación de empleos, aunque estos sean muy relativos. Ayer, después de que el Instituto Mexicano del Seguro Social emitió su comunicado sobre los “Puestos de trabajo afiliados al IMSS al mes de mayo del 2013”, la Secretaría de Hacienda hizo lo propio, donde destacó que el empleo tuvo un crecimiento anual de 4% durante ese mes, superior al crecimiento de la economía.

Además, mencionó, en lo que va del 2013 el número de trabajadores se ha incrementado en 292,859 puestos respecto al cierre del 2012. “Esta cifra es 22% mayor que la generación promedio de empleo de un periodo similar en los diez años anteriores”.

Sin embargo, ninguna de los dos comparativos describe con precisión los avances en esta materia durante este “nuevo” gobierno: 1) la comparación anual incluye la generación de empleos durante los seis últimos meses del sexenio de Felipe Calderón (de junio a noviembre del 2012), y 2) el recuento “en lo que va del año” excluye el primer mes de la administración de Enrique Peña (diciembre del 2012).

Así, tal vez la relación más adecuada es la que considera el empleo generado en los últimos seis meses; es decir, de diciembre del 2012 a mayo del 2013.

Entonces, si el número de asegurados es de 16’354,902 al 31 de mayo, el número de plazas nuevas en lo que va de este gobierno es de 59,966, un aumento inferior, por ejemplo, al creado en el mismo periodo en los inicios del sexenio anterior. Este contraste es aún más significativo cuando se considera que el país ya cuenta con una reforma laboral aprobada.

¿Qué hay detrás de esta baja tasa de generación de empleos formales? Sin duda es la marcada desaceleración económica. Mientras hace seis años la economía crecía a tasas de más de 3.0%, en los últimos meses fue de alrededor de 1.0 por ciento.

Así que no hay de otra: sin inversión y crecimiento no se creará mayor empleo.

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