En el PRD se llevan pesado

Hace unos días, la presidenta nacional del PRD, Alejandra Barrales Magdaleno, aceptó que en su partido se llevan pesado. De esa forma respondía a la petición que hicieron Graco Ramírez y Silvano Aureoles, gobernadores militantes de su partido, quienes pretenden que haya elección de una nueva dirigencia nacional, aunque el período de ella concluye en un año.

Los políticos siempre se han llevado así, sin respeto, irrumpen, acusan, señalan, denuncian, la mayor de las veces sin argumento. Siempre ha sido, los candidatos se agreden, se insultan en los períodos de campaña y nadie sale lastimado, si acaso quedan agravios que más tarde se cobraran.

De todos lados surgen palabras altisonantes en contra de los políticos, en las marchas, mítines y plantones, los quejosos lanzan improperios contra las autoridades, como una muestra de rechazo a su accionar. Como siempre en estas historias hay quienes se llevan de esa forma, pero no se aguantan cuando encuentran quien les responda de la misma manera.

En el Congreso de la Unión, diputados y senadores se comportan como si estuviesen en un palenque, se agreden, se insultan, se amenazan, se distraen y hasta discuten los temas de política y las iniciativas que se presentan. Dueños y señores de su espacio, los diputados y senadores se comportan como se les da la gana con sus invitados o comparecientes. Unas veces los dejan entrar y los tratan cordialmente, pero en otras destilan coraje en contra de esos personajes. Al final, Alejandra Barrales no se dejará, no adelantará el proceso interno.

La posibilidad de una alianza opositora para el Estado de México, cada vez se ve más lejana, dado que en el PRD es notoria la división interna de los amarillos. La corriente conocida como ADN, que encabeza Héctor Bautista, está en contra de que se lleve a cabo.

Por lo mismo, el PRI no se puede equivocar en la decisión que tome, pues de hacerlo estaría en graves aprietos para el 2018. Aseguran en Toluca que hasta el momento, no hay nada para nadie en la carrera para la candidatura mexiquense. Todos, como nunca antes, se sienten con apellidos y amistades cercanas al gran elector, pero nos aseguran que hasta el momento no hay nada para nadie.

A pesar de que los altos mandos de la política priista, en Los Pinos, en el Edomex y en Insurgentes Norte, han pedido permanecer quietos, nadie ha hecho caso, y lo mismo Ernesto Nemer, Alfredo del Mazo, que Carlos Iriarte; Navarrete Prida; Ana Lilia Herrera, Luis Miranda; José Manzur; andan muy movidos y urgidos para que se conozca el nombre.

Sin duda, la elección del candidato no será fácil porque los adversarios están decididos a sacar al tricolor del Estado de México a cualquier costo y por eso las alianzas que pretenden hacer de cara al 2018, pesan para tomar la decisión.

En el PAN, la caballada también está gorda y muy divididos por las preferencias, dicen en el propio blanquiazul, de su dirigente Ricardo Anaya. También todos o casi todos han destapado sus aspiraciones e igual que en el PRI, se sienten con posibilidades de ganar el proceso electoral del año entrante.

Por lo pronto, parece que Josefina Vázquez Monta no quiere la candidatura, a pesar de ser la más adelantada en las encuestas. Se negativa, aseguran, que se debe a la falta de apoyo de todos los grupos panistas en la entidad, y como ya no quiere quedarse sólo como en el 2012 que la abandonó Felipe Calderón, y por la balconeada que le pusieron con esos recursos que recibe, entonces eso la mantiene aparentemente alejada de la contienda.

En cambio, están apuntados José Luis Reveles, Ulises Ramírez, Enrique Vargas, alcalde Huixquilucan, Héctor Olvera, edil de Naucalpan, quien tiene una falla gravísima en materia de seguridad y el presidente municipal de Atizapán.

Solo en el PRD la caballada está flaca. No tienen a ninguna figura que pueda dar la pelea y seguramente por eso buscan a toda costa una alianza con el PAN, aunque sea con un candidato azul. Eso de su llamado a integrar un frente amplio de izquierda es pura vacilada. Todos saben que el perredismo no tiene una base amplia y Alejandro Encinas, ya no está en su partido y los panistas no lo quieren porque sería tanto como cerrarles la puerta a sus aspirantes. Y los de Morena tienen ya a su candidata y no nos imaginamos que quieran bajarla para darle su lugar a un del sol azteca. Así es que están perdidos.

En Morena, la candidata por dedazo tabasqueño ya es la diputada Delfina Gómez que ya anda en campaña. Además, el señor López Obrador ya ha declarado que no hará coalición con ningún partido, y menos con el PRD.

ubaldodiazmartin@hotmail.com

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