La educación superior y el escenario internacional

La educación superior y el escenario internacional
Por:
  • raudel_avila

El último debate presidencial reveló el trabajo innovador del INE como organizador de ejercicios más atractivos y diferentes, respecto a lo que habíamos visto los últimos 24 años en México. No obstante, también reveló la dificultad de extraer detalles precisos de las propuestas de los candidatos, cuando quieren evitar un tema.

En educación superior, la propuesta de Andrés Manuel López Obrador se limita a garantizar el ingreso de toda la población a la universidad sin explicar de dónde saldría el presupuesto para cumplir esa promesa. Dejemos de lado por un momento el financiamiento. No es posible comprometerse a ofrecer educación superior gratuita a toda la población, por la sencilla razón de que no todos los mexicanos tienen un certificado de estudios de bachillerato, requisito mínimo de admisión. Lo más lógico y razonable sería iniciar por ocuparse de garantizar que toda la población concluyera sus estudios de preparatoria, como bien propuso José Antonio Meade.

Por otra parte, hay discusiones adicionales que se desprenden de la anterior. ¿Qué licenciaturas o ingenierías se ofrecerían como opción a los muchachos? ¿Todas? ¿Habrá un estudio de mercado regional para garantizar que sean carreras con posibilidades reales de inserción a un empleo? ¿O simplemente se aumentará la matrícula de las ya existentes con independencia de su perspectiva laboral cuando terminen los estudios? ¿En dónde van a trabajar esos egresados? Resulta urgente establecer un programa de seguimiento de egresados de todas las universidades públicas para confirmar su inserción en empleos relacionados con su área de estudio.

Otro elemento central en el análisis debería ser la internacionalización de la educación superior. ¿De qué manera se difundirán las investigaciones mexicanas en el exterior? ¿Cómo se planea traer más profesores, investigadores y estudiantes extranjeros a México? ¿Sería conveniente empezar a ofrecer programas de estudio en inglés como se hace en España? Los nacionalistas dirán que no es prioritario traer extranjeros al país. La respuesta contundente es que los españoles exiliados de la guerra civil, durante el siglo pasado, enriquecieron sensiblemente la vida universitaria mexicana. Otro tanto hicieron chilenos, argentinos y uruguayos. ¿No se podría intentar una política de atracción de talento semejante con catedráticos perseguidos por la dictadura de Maduro en Venezuela?

Finalmente, ¿no deberíamos preocuparnos por intensificar los intercambios académicos de estudiantes y profesores mexicanos con Asia? En un mundo donde el ascenso chino se antoja imparable, falta gente conocedora de la geopolítica de una región decisiva en el siglo XXI. En el siglo XIX, Thomas Carlyle escribió que “la mejor universidad es una buena colección de libros”. Ya no es así. El avance tecnológico y las nuevas condiciones internacionales exigen un debate más amplio sobre el tema.