Los enredos de Hillary

Los enredos de Hillary
Por:
  • montserrats-columnista

Hillary Clinton lleva años soñando con la presidencia de Estados Unidos pero jamás llegó a imaginarse el escenario en el que se encuentra hoy: a dos meses de la elección, siendo la favorita pero peligrando su ventaja ante el caballo negro que salió de la nada para robarse la nominación del partido conservador.

Hillary y su equipo probablemente sean los políticos más profesionales y concienzudos de la actualidad. No me queda duda de que ella está preparada para responder con soltura a cualquier argumento con contundentes razones, datos y estrategias probadas en su amplia experiencia. El gran problema que la está llevando a perder una ventaja que se antojaba inalcanzable es que justo no le han dado argumentos a contrargumentar. Trump no es un político tradicional, es una figura inestable e impredecible que ha destrozado el sistema y que, por las mismas fallas de las reglas electorales, ahora puede realmente alcanzar la Casa Blanca.

Las encuestas muestran que el núcleo del “votante trumpiano” no cambia, ni aumenta ni decrece. Este número, cercano al 41% según los sondeos, no le alcanza para ganar. Lo asombroso ha sido ver cómo Clinton ha ido perdiendo votos al no convencer o dejar de repeler a los independientes y a los conservadores que no están convencidos de que el magnate sepa lo que está haciendo. Esta carrera no está para que la gane Trump, está para que la pierda Clinton.

¿Qué factores han hecho que Hillary pierda votos y que esta carrera se cierre, dándole a Trump una probabilidad real de ganar? En primer lugar, ella misma es su principal enemigo. No sólo es una pésima candidata en campaña al no conectar con la gente ni ser una gran oradora, como lo fueron Bill Clinton y Obama, sino que su larga trayectoria y experiencia le juega en contra al tener mucha cola que le pisen. Por otro lado, divide el voto al ser una figura pública con poca aceptación popular y controvertida en muchos temas en los que ha sido tremendamente clara en cuanto a su posición. El Partido Verde, con Jill Stein, y el Libertario, con Gary Johnson, si bien no tienen ninguna posibilidad de ganar, sí le quitan votos cruciales a los demócratas para asegurarse una cómoda victoria.

Así, tenemos muchos votantes que rechazan tajantemente a Trump pero que pueden no votar por Hillary o no votar en absoluto, siendo ambos escenarios dañinos para la candidata y definitivamente convenientes para el magnate.

Trump para ganar no tiene que suavizar su discurso, simplemente tiene que dejar que Clinton se enrede y pierda votos, aprovechando cuanto evento suceda para forzarla a tomar posturas contundentes; ella tendrá que renunciar a pedir que la voten por ella misma para pedir el voto por ir en contra de Trump.

msalomonf@gmail.com