Y pues… no les importó el turismo

Y pues… no les importó el turismo
Por:
  • gerardo_garcia

Y ahí están los hechos. Mañana terminan las campañas presidenciales y no, no hubo en ninguno de los candidatos muestra de interés hacia la industria más allá de la participación en un foro especializado en el que por sesenta minutos hablaron de este sector. No importa que sea un motor económico de la magnitud que lo es. No bastó, siquiera, que sirva para hacer bonitos los discursos.

Recupero una columna publicada hace un mes en este diario en la que cuestionaba si el turismo les importaba a los candidatos presidenciales. Hoy, al término de las campañas, queda claro que no fue para ellos lo suficientemente importante como para dedicarle algo más que un discurso.

Transcribo algunas partes de esa columna:

Hace unos días los cinco candidatos presidenciales participaron en el Foro Internacional de Turismo en la Ciudad de México. Era, pues, el foro en que podían exponer con prístina claridad sus propuestas en la materia. Y si bien cada uno de ellos tuvo un desempeño distinto, ninguno fue sobresaliente. Unos más, otros menos. Pero no hubo ninguna propuesta innovadora o un compromiso sobre lo que es en estos momentos fundamental.

…Lo cierto es que a todos ellos les falta, como a la mayoría de la clase política de este país, comprender que el turismo genera el 8.5 por ciento del Producto Interno Bruto del país y que es de los pocos sectores que ha venido creciendo a más del doble que el resto de la economía.

Y que no siempre va a suceder así.

Los Indicadores Trimestrales de Actividad Turística (ITAT) revelaron que el PIB turístico del país creció en promedio 3.4 por ciento durante 2017 con base en cifras originales, lo que representa su nivel más bajo desde 2015, informó este lunes el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi).

En 2015, el promedio de crecimiento del PIB turístico arrojó un incremento de 3.6 por ciento, mientras que, en 2016, la cifra ascendió a 4.2 por ciento, de acuerdo a la serie original publicada por el instituto.

La nota que publicó el periódico El Financiero es clara. Si bien no es una caída pronunciada, los especialistas advierten ya de una ralentización evidente. Las razones pueden ser varias: el incremento de la inseguridad, el ambiente político, la incertidumbre económica en nuestro país. Lo cierto es que ese dato debe prender las alertas.

Pues las alertas no parecen haberles importado en los cuarteles de campaña. Si los aspirantes a la Presidencia de México consideran que por los años de éxito de este sector, no hay necesidad de considerarlo en cuenta, se equivocan. La necesidad de compromiso de las autoridades hacia el turismo es determinante. Es fundamental que se considere esta actividad económica como prioritaria y a ninguno de ellos parece interesarle. Ni siquiera para los discursos, pues.

Es tiempo de campañas y promesas. Lamentablemente en éstas no parece tener peso la industria turística.

Y eso no puede ser visto más que como una pésima señal.