64 Muestra Internacional de la Cineteca, principal atractivo de la cartelera cultural
La 64 Muestra Internacional de Cine en la Cineteca Nacional se convirtió en uno de los principales atractivos de la oferta cultural durante la Semana Santa en la Ciudad de México. Se calcula que la afluencia de asistencia al recinto de Xoco ha sido de más de 40 mil aficionados al cine, cifra que supera en un 10 por ciento la asistencia del año pasado.
Jóvenes estudiantes, familias y personas de la tercera edad aprovecharon sus días de asuetos para asistir a la proyección de las 14 películas premiadas en varios Festivales Internacionales: ofrecimiento exclusivo de este tradicional evento fílmico.
“No vemos obligados a reforzar el equipo de apoyo en taquillas, entradas, estacionamiento, cafeterías, librerías e instalaciones en general frente a la avalancha de público que en estos días de vacaciones acude a la Cineteca Nacional por la programación de la 64 Muestra, los estrenos y los ciclos. Más o menos, tenemos un registro de más de 8 mil personas por día. Viernes, sábado y domingo aumenta a unos 12 mil visitantes”, informó para La Razón, Juan Manuel Miranda, subdirector de Operaciones de Salas.
Cartel que dio inicio con el filme mexicano De la infancia (2009), de Carlos Carrera, en continuación de La maldición de Thelma (Noruega, Joachim Trier, 2017), La maestra (Eslovaquia-Republica Checa, Jan Hrebejk, 2016), El ciudadano ilustre (Argentina-España, Mariano Cohn-Gastón Duprat, 2016), Amante por un día (Francia, Philippe Garrel, 2017) y Joaquín (Brasil-Portugal, Marcelo Gomes, 2017), entre otras producciones internacionales.
Destacan por su propuesta temática y valores formales el documental de la veterana Agnès Varda, Rostro y lugares (Francia, 2017); Stalker, La Zona (Unión Soviética, 1979), el mítico filme de ciencia ficción de Andréi Tarkovski (1932 – 1986) en versión restaurada digitalmente; Lucky (Estados Unidos, 2017), de John Carroll Lynch: conmovedora crónica del derrotero espiritual de un hombre de 90 años en un poblado del desierto de Arizona; y la poética Porto (Portugal-Estados Unidos, 2016), del brasileño Gabe Klinger: el encuentro íntimo y pasional de dos solitarios en una noche en la hermosa ciudad portuguesa de Oporto.
“He venido toda la Semana Santa a disfrutar la muestra y a ver algunos estrenos. Este lugar se ha convertido en una gran plaza cultural que no se puede desperdiciar. Sigue siendo económico el costo de los boletos y la programación rompe con los esquemas de las películas de Hollywood presentes en los circuitos comerciales del país. Seductora invitación cultural en estos días de descanso”, comenta Irene García, psicóloga de profesión, vecina del barrio de Topilejos, Tlalpan.
dlm