Federico Kampf fusiona en Ibiza tradiciones, técnicas...

Ibiza no necesita turismo, pero le quieren dar un sentido más orgánico y cultural para que no sólo sea visto como un lugar de “fiesta”, aseguró Federico Kampf, el primer mexicano en pintar un mural en Italia.

En entrevista con La Razón, el artista dijo que las autoridades españoles le invitaron a participar en la creación de un nuevo mural para representar mediante el arte visual parte de la cultura mexicana, la cual será mostrada con figuras de diferentes culturas y tradiciones en el WTC de la isla que año con año reúne a miles de visitantes.

“Estaba realizando el mural en Roma, y yo tengo una visión de tener un mural en cada país así como gente que me representa en otros países, en Guatemala, en Italia, en España, mi representante en España tiene contacto con las autoridades y tuvo a bien presentarles mis proyectos”, comentó.

El Dato: El mural que se ubicará en un área de pasarelas, plasma un ritual de vida con seres de las mitologías fenicia y romana.

Por ello, cuando la representante de Federico tuvo el acercamiento con aquellas autoridades, presento sus monumentos y pinturas, las que llevaron a que su exposición sea mostrada en Ibiza.

Además, Federico Kampf aseguró que el muralismo se encuentra, tanto en Europa como en todo el mundo, en una labor muy escasa, porque sólo se asocia con las ideas de lo urbano y del arte efímero al confudirlo con street art.

“Lo que estaba haciendo, mis monumentos que ya he hecho acá y allá en Europa, y en todo el mundo es muy escasa la labor del muralismo académico, está en boga el muralismo pero el muralismo urbano, que es otro tipo de arte”, comentó.

Es decir, la gente no ha conocido cómo es en realidad el muralismo académico, porque está acostumbrado a percibir sólo lo urbano.

“La diferencia entre un mural urbano y uno académico, entendiéndolo como Renacimiento, como el de Diego Rivera y Orozco, ése es clásico, es como la música académica y la música de banda, nadie niega que sea música, pero la música de banda tiene otro tratamiento” explicó Kampf.

Sin embargo, el proceso de realizar un mural, es lo que hace la gran diferencia, y eso es lo que desea llevar el muralista mexicano hasta las tierras españolas.

“El grafiti lo puedes hacer en tres días y un mural académico puede ser de dos meses a tres años, por el tipo de proceso, la pretensión de temporalidad, mientras que el mural urbano está hecho para ser efímero”.

Asimismo, Kampf dijo que la mayoría de muralistas que buscar crear algo académico, lo hacen con la intención de que su obra quede para siempre, pues al realizar el pintado, ellos, buscan hacerlo atemporal.

“El mural tiene la pretensión de universalidad y atemporalidad, cuando un muralista hace uno atemporal está esperando que dure para siempre, no siempre pasa pero se hace para eso, por eso se piden también ciertos materiales”, opinó.

La tendencia y dinámica, es lo que busca el muralista, para que sus obras tengan una relación poliangular, y que éstas puedan afectar, en dado caso la arquitectura desde donde se vea.

“La óptica, el tratamiento del mural académico es poliangular, tú ves que tiene una relación con la arquitectura, desde donde tu veas que está el edificio, alteras el espacio con el mural con objetos ópticos, pensando en lo poliangular, la tendencia y dinámica del cuadro, en el urbano no importa eso”, dijo.