J. M. Coetzee critica “pretensiones universalistas” del idioma inglés

J. M. Coetzee critica “pretensiones universalistas” del idioma inglés
Por:
  • raul-campos

Desde su infancia y durante toda su vida, el literato sudafricano John Maxwell Coetzee, Premio Nobel de Literatura 2003, ha escrito en inglés: “de niño, de joven hombre, de estudiante…”; no obstante, nunca sintió que fuese su lengua materna y criticó la hegemonía de este idioma.

“No me gusta la política en la cual el inglés está manejando el mundo; detesto la forma en que empuja hacia abajo los idiomas menores que encuentra en su camino y eso es lo que está ocurriendo en Sudáfrica; desdeño las pretensiones universalistas de esa lengua: la creencia, sin preguntas, de que el mundo es como es según los ojos del inglés, no me gusta la arrogancia que esta situación crea en sus parlantes nativos. Por ello hago lo poco que puedo para resistir esa hegemonía de ese idioma”, afirmó ante los aplausos de estudiantes que ayer se dieron cita en la Sala Nezahualcóyotl de la UNAM.

Coetzee ofreció un conversatorio junto a la académica Raquel Serur, quien al inicio le preguntó del escepticismo y distanciamiento hacia aquel idioma, pues algunos de sus libros, como La muerte de Jesús (2019) y Siete cuentos morales (2018) se publicaron primero en español que en la lengua anglosajona.

“No tenía duda alguna de que el acceso al idioma me estaba liberando del punto de vista reducido de los africanos; caí en el encantamiento de los poetas del inglés, particularmente los modernistas, y escribí poesía que los imitase”, señaló.

"En un mundo ideal me hubiera gustado publicar la infancia de Jesús sin un título y que le hubiera permitido al lector saber que se trata de la vida de Jesús”

J. M. Coetzee

Escritor

Añadió que las razones de que parte de su literatura ha aparecido antes en español, que en su idioma materno, eran dos: su obra no está enraizada en el inglés y como acto político.

En su trilogía de novelas La infancia de Jesús, Los días de Jesús en la escuela, y la reciente, La muerte de Jesús, se asume que los personajes hablan español; al respecto dijo que él se resiste completamente a la idea de que, en la siguiente vida, el inglés sea una lengua universal.

[caption id="attachment_1037795" align="alignnone" width="696"] Estudiantes y fans del autor, ayer, esperando que les autografiara un libro. Foto: Raúl Campos, La Razón[/caption]

“Me resisto completamente a que el inglés sea una lengua universal, que tenga otra vida; quizá en el más allá tendremos que aprender hebreo, sánscrito, griego, esperanto o algún idioma inimaginable de los ángeles”.

Coetzee consideró una paradoja que esos tres títulos, en donde todos hablan español, se hayan escrito en inglés: “la verdad es que yo tuve que haber publicado los tres libros traducidos al español ante todo, pero no lo hice”, abundó.

También habló de los años que residió en Texas, donde se doctoró en Lingüística Computacional, en la Universidad de Austin, experiencia por la cual escribió el ensayo Recordando Texas.

"No provengo de una familia religiosa. No es que mis padres fueran ateos pero simplemente no encontraron la religión como algo relevante en su vida. Igualmente, en mi vida adulta, la religión nunca ha sigo algo relevante para mí”

“¿Cómo un joven sudafricano llegó a estudiar a Texas? La respuesta es que me equivoqué en mi educación: en la prepa decidí que quería ser matemático y me metí a estudiar eso a la universidad y después me fui a trabajar a una empresa que fabricaba computadoras”, recordó. Relató que tras algunos años de laborar en ese sector se dio cuenta de que estaba comenzado a pensar como una máquina y no como un ser humano. Por ello, con valor y convicción, escribió a una feria universitaria en Estados Unidos, solicitando “si podían aceptar a alguien que había seguido el camino incorrecto, pero que ahora deseaba comenzar de nuevo”.

Afortunadamente, contó, la Universidad de Austin le escribió: ‘puedes venir’. “Estuve ahí durante la Guerra de Vietnam; probablemente no brindaba la mejor educación. No obstante, me rescató de un camino poco claro y me permitió,  durante tres años, leer libremente cualquier cosa”.

Dijo que su estancia fue financiada por los contribuyentes estadounidenses. “Por ello, aunque cada vez me siento más ajeno a ese país, siempre voy a estarle agradecido, por su generosidad en aquella época”, finalizó el escritor.

J. M. Coetzee

Nació: 9 de febrero de 1940, Sudáfrica

Profesión: Escritor

Reconocimientos: Premio Jerusalem, 1987; y doctorado Honoris Causa de la Universidad Central de Colombia, 2013, entre otros