La mirada crítica de Otto Dix, como nunca antes en México

Los libros de historia relatan los escalofriantes sucesos ocurridos en las dos guerras mundiales que ha padecido la humanidad; sin embargo, las palabras muchas veces se quedan cortas ante la contundencia de las imágenes de artistas como Otto Dix, quien captó el horror durante esos periodos de crisis. Una instatación que se inaugura hoy en el Museo Nacional de Arte exhibe pinturas del plastico alemán que mejor describió la tragedia causada por los conflictos bélicos.

Dix es uno de los pintores más trascendentes del siglo XX; el régimen nazi lo censuró y destruyó algunas de sus obras porque en ellas se atrevió a retratar con honestidad y crudeza la guerra y la deshumanización que reinaron en Alemania en esos años; no obstante, también desarrolló otras facetas que lo llevaron a experimentar distintos estilos como el cubismo, y el expresionismo, entre otros.

La exposición esta concebida para mostar aquello que no se quiere ver, es el concepto que rige la instalación, la cual presenta más de 160 obras entre las que destacan oleo, grabados, acuarelas y dibujos. Además es la primera gran retrospectiva creada ex profeso para este país, en el marco del Año Dual México-Alemania.

Las piezas que integran Otto Dix. Violencia y pasión “muestran las contradicciones sociales, a través de técnicas como el collage. En ellos critica la realidad, pero en el plano de la ficción”, comentó Ulrike Lorenz, directora de la Galería de Arte de Mannnheaim, Alemania y curadora de esta exhibición.

El visitante que realice el recorrido será introducido en un laberinto que busca confrontarlo con las obras y es una imagen en el que el propio artista se inmortalizó el que da la bienvenida: “lo muestra fumando un cigarrillo, pensativo por los acontecimientos que observaba, en ese sentido quisimos cerrar la muestra con otro autorretrato en el que se le ve cargando a uno de sus nietos y sonríe, esa pintura es especial porque es la única en la que se muestra feliz”, agregó la directora Lorenz.

El artista plástico documenta con  una mirada crítica y cruda  los hechos por los que pasaba Europa en 1914: “Dix, plasmó en sus obras la historia de la Primera Guerra Mundial, cuando azotó y él se encontraba  en las  trincheras” afirmó la especialista.

Soldados heridos en el campo de batalla, paisajes desolados, personajes ocultos tras máscaras de gas son imágenes que se observan en la muestra. “También fue criticado y alabado en su época por su énfasis en plasmar el sufrimiento con su mirada ácida y reflexiva”, agregó la experta.

Entre las piezas que se pueden ver en el Munal destacan 30 cuadros y 50 grabados al agua fuerte del ciclo bélico de 1924.

Realista, expresionista, dadaísta o gran maestro —como ha sido calificado— fue uno de los espectadores de aquellos trágicos sucesos y a la vez, la víctima que logró dejar plasmada la otra versión de la historia a través del tiempo. “Encontramos a un artista que platica con nosotros en un idioma general, y un idioma que entenderán en todos los países”, Reinhard Maiworm, director del Instituto Goethe.

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