El piloto estadounidense Colton Herta, quien suena para ser coequipero de Checo Pérez en Cadillac en la próxima temporada de Fórmula 1, se estrelló fuertemente en la clasificación para las 500 Millas de Indianápolis este sábado, horas después de que el neozelandés Marcus Armstrong fuera retirado en camilla tras un aterrador accidente prácticamente en el mismo lugar en el Indianapolis Motor Speedway.
Ambos volantes fueron autorizados para conducir de nuevo, pero si sus autos estarían listos era otra historia. Sus equipos estaban frenéticamente tratando de preparar autos de respaldo, y en el caso de Armstrong, eso resultó ser uno de sus autos de circuito de carretera.
“Estoy bien”, dijo Armstrong, cuyo golpe ocurrió durante una práctica de una hora antes de que comenzara la clasificación. “Obviamente fue un golpe bastante fuerte, pero me siento bien ahora. Crucemos los dedos para que podamos salir para una instalación (correr) o incluso una carrera completa si tenemos suerte.”
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La clasificación decide los 12 más rápidos que tendrán la oportunidad el domingo de estar en las primeras cuatro filas —y finalmente la pole position— para la carrera del 25 de mayo. Aquellos que califiquen de los lugares 13 al 30 aseguran sus posiciones, mientras que los cuatro autos más lentos o aquellos que no puedan registrar un tiempo el sábado entran en un desempate de última oportunidad el domingo para determinar los últimos tres lugares en la parrilla de 33 autos.
Colton Herta y Marcus Armstrong se estrellaron en la Curva uno, donde los vientos de hasta 30 millas por hora que son bloqueados en gran medida por las gradas en la recta principal cambiaron repentinamente a estar detrás de los pilotos. El auto de Herta golpeó la pared exterior y luego aterrizó de lado y se deslizó hacia el tramo corto antes de detenerse. Los equipos de seguridad tuvieron que trabajar juntos para volver a ponerlo sobre sus neumáticos.
Colton Herta, tranquilo después del fuerte choque
Colton Herta necesitó ayuda para llegar a un vehículo que lo llevó al centro médico del circuito, pero fue dado de alta poco después. Para entonces, su equipo en Andretti Autosport ya estaba profundamente en la preparación de un auto de respaldo para devolverlo a la pista.
“Por suerte, hoy en día estos choques se ven mucho más aterradores de lo que se sienten, no quiero decir que este se sintiera bien”, dijo Herta. “No hubo señales reales que lo indicaran. Estábamos súper contentos con el auto esta mañana. Salimos sueltos y ni siquiera pudimos completar la Vuelta uno.”
Armstrong también pudo salir de su auto destrozado, pero fue ayudado inmediatamente a subir a una camilla. Hizo un gesto de aprobación con el pulgar mientras lo cargaban en una ambulancia y lo llevaban al centro de atención, donde fue dado de alta aproximadamente 90 minutos después.
El joven piloto neozelandés de 24 años dijo que su confianza no se vio afectada, a pesar del fuerte golpe. Y si acaso, se vio reforzada por el hecho de que su compañero de equipo, Felix Rosenqvist, registró el sexto promedio de cuatro vueltas más rápido durante su carrera de clasificación.
EVG
