Paul Green: Mondo Scripto de Bob Dylan

Paul Green: Mondo Scripto de Bob Dylan
Por:
  • alicia_quinones

Este octubre en Londres, Reino Unido, se inauguró Mondo Scripto, exposición histórica que comprende trabajo visual y literario de Bob Dylan. La muestra incluye las canciones más famosas del Premio Nobel de Literatura, sobre todo de la década de 1960: se trata de letras escritas a mano, acompañadas de un dibujo hecho por él mismo a modo de recreación o interpretación de cada tema. El trabajo se presenta en la Halcyon Gallery, ubicada en el centro londinense y con una sólida historia dentro del mundo del arte desde 1982. Paul Green, presidente de la galería, es también el hombre que se ha asomado al arte visual de Dylan desde hace más de una década, para así armar este retrato particular del autor de “Like a Rolling Stone”.

¿Cómo llegó Bob Dylan a esta galería?

En Halcyon Gallery hemos trabajado con él durante unos doce años, aproximadamente. Comenzamos con la exposición Drawing Blank y también otra en un museo en Kemnitz, Alemania. Cuando hicimos la primera muestra no tenía idea de qué iba a pasar, en serio, pero el interés de la gente fue tan grande que teníamos filas de interesados en entrar. Todo fue creciendo, desde Drawing Blank hasta los trabajos en hierro que ves aquí, y la exposición Mondo Scripto será parte de una muestra internacional. La primera presentación de esa retrospectiva tendrá lugar en Shanghái, en septiembre de 2019.

¿Qué distingue esta muestra de las otras que trabajaste con Dylan?

Él no ha querido que la música se relacione con su expresión artística visual, pero esta vez reescribió sesenta canciones de su repertorio y realizó un dibujo en grafito para cada una. Claro, él nunca explica su trabajo, nunca ha querido hacerlo ni dar entrevistas al respecto, pero en estos dibujos efectivamente ha decodificado alguna parte de cada una de las canciones. Si observas la letra, que en algunos casos ha modificado o reescrito, y además miras las imágenes, notas cuánta fuerza tienen. Por ejemplo, hay un dibujo de un hombre parado en la Casa Blanca, en la oficina oval; está mirando hacia fuera y viendo una manifestación. O el de un vaquero al que están alimentando con frijoles sobre una cuchara. Me parece que tiene relevancia respecto a cómo Estados Unidos ve a sus vecinos, particularmente a México, y qué significado tiene esa visión del norte para la población actual. Las letras son tan relevantes hoy como cuando él las escribió, ya fuera en los años sesenta o en los setenta. La exposición se enfoca de 1962 a 1976 y muestra todo el poder de sus letras, esas letras por las cuales ganó el premio Nobel y que lo hacen ser reconocido como uno de los mejores autores, poetas y quizás también filósofos contemporáneos.

La época reflejada en la exposición es, quizá, la más importante en su trabajo, la que dio el gran impulso a su carrera. ¿Cómo se define el mundo de Dylan a través de esta muestra?

Me parece que toma elementos de sus primeros días, cuando dejó Minnesota y viajó de aventón hasta Nueva York. Y es que, por supuesto, Nueva York en los años sesenta era realmente el centro de la actividad artística: había poetas, músicos, el mundo del folk. Existía la oportunidad de que las personas llegaran, se mezclaran y hablaran de cultura. Y claro que también eran momentos de gran turbulencia: el nacimiento de la conciencia de los derechos civiles y también el arranque de ese movimiento. Bob Dylan se subía con Martin Luther King y cantaba con Joan Baez. Creo que, literalmente, como dijo el poeta Allen Ginsberg, la antorcha pasó a la generación siguiente.

Dylan se convirtió en el punto focal de todo lo que estaba sucediendo, y no solamente en Estados Unidos sino también en otros lugares en el mundo.

"La exposición se enfoca de 1962 a 1976 y muestra todo el poder de sus letras, esas letras por las cuales ganó el premio Nobel”.

Trabajaste con Dylan en las exhibiciones pasadas. ¿Cómo fue ese proceso?

Bueno, lo visité y verlo en su estudio de trabajo con hierro y luego ir a su estudio de pintura ha sido realmente una experiencia increíble, pero la relación con todos los artistas tiene que ser una simbiosis. Así que en realidad se trata de hablar con él, ¿sabes?, de tener una conversación y preguntarle: ¿qué te gusta hacer? Platicas sobre sus ideas, lo que le gusta ser, lo que piensa que sería mejor para él, y luego trabajas en conjunto en ese proceso. Cuando hizo la muestra The Beaten Path hablamos de cómo le gustaría llevar a cabo el trabajo, la idea que tuvo primero de trabajar dibujos en papel y luego sobre lienzo, y más tarde sobre enormes lienzos. Eso fue algo grandísimo para él, un poco como cuando Picasso pintó el Guernica: no pensó que podría hacerlo, lo persuadieron de intentar y, claro, se convirtió en el trabajo más importante que jamás hizo. Para Dylan, las pinturas de The Beaten Path, las pinturas de The Endless Highway, fueron casi como su vida, muy autobiográficas en tanto que Dylan sigue todavía en la carretera, aún sigue haciendo giras de cien días. Y puedes sentirlo. Cuando ves la pintura que está aquí detrás de mí [The Endless Highway], eres capaz de percibir su vida, esa vida que transcurre en la carretera desde el amanecer hasta el atardecer, pero el camino está arriba y también abajo y no sabes en realidad a dónde vas ni en qué va a terminar. No estoy seguro de que haya comenzado así, sin embargo terminó de esa manera. Las pinturas son el viaje de Dylan y observar un Estados Unidos que fue, pero que no necesariamente es igual hoy.

¿Cuántas exposiciones han tenido en la galería relacionadas con la escritura de un artista?

Es la primera vez que hacemos algo como esto y es también la primera que Dylan lo ha hecho, es un parteaguas. Como dije, esta exposición será parte de The Retrospective que después se irá a China y viajará por el mundo. Es una primera vez histórica, muy histórica porque Dylan ha estado de acuerdo en reescribir canciones. Además tenemos aquí a Jimmy Iovine, quien ha sido uno de los productores musicales más famosos del mundo, hizo el Born to Run de Bruce Springsteen, el Rock a Little de Stevie Nicks, trabajó con Patti Smith, fundó Interscope Records y Soul Beats. Él dijo que esta exposición es un regalo, que Dylan está siendo muy generoso al darle al mundo esta muestra y, desde su punto de vista, estos dibujos son el texto en pintura más importante que el mundo ha visto. Con esto Bob Dylan se erige como el artista estadunidense más importante de la posguerra. Es una primera vez muy relevante para el mundo del arte en muchos sentidos y nos sentimos orgullosos de llevarla alrededor del mundo.