Explora Hagerman visiones de la vejez en México, Canadá, Colombia, Italia...

Explora Hagerman visiones de la vejez en México, Canadá, Colombia, Italia...
Por:
  • jesus_chavarria

Sin duda es el documental el formato fílmico por excelencia de nuestro país.

Es por éste que incluso durante sus peores momentos, la industria cinematográfica mexicana ha logrado mantener la continuidad, entregando propuestas siempre interesantes y llamativas, muchas de ellas reconocidas en el extranjero, con títulos casi de culto como Ladrones viejos o maravillas recientes como Tempestad.

Sin embargo, esto no ha sido suficiente para cambiar los prejuicios que le impiden al público en general acercarse a este tipo de trabajos, catalogados como excesivamente intelectuales y complejos o, lo que es peor, aburridos.

Nada más lejos de la realidad, y una estupenda prueba de ello es la más reciente película de Lorenzo Hagerman, quien lleva dos décadas trabajando como cine-fotógrafo y en Aquí sigo lo pone de manifiesto con una manufactura impecable.

En ella presenta los testimonios de una gran cantidad de personas mayores, que raya el siglo de existencia —o que ya lo rebasa por unos cuantos años—, y proviene de distintos países y pertenecen a diversos extractos sociales. Es un mosaico de visiones de vida, que va saltando con gracia y contundencia,

de Canadá a Colombia, Costa Rica, Japón, Italia, España y México, dándole voz a aquellos que ya por el simple hecho de llevar tanto tiempo caminando en este planeta, valen la pena ser escuchados.

Pero lo mejor es que todo el asunto va más allá de lo usual en la mayoría de las producciones sobre dicho tema, al estilizar el testimonio y enfocarse en mostrar los motores detrás de las pequeñas acciones que los mantienen vigentes, dentro de una sociedad que por momentos pareciera querer ignorarles. Con cada secuencia vemos cómo en lugar de evidenciar las dificultades del paso del tiempo, se revaloran las experiencias y emociones acumuladas, la pasión que no se oculta en el andar pausado, sino que se refuerza con la mirada y se expone con la sonrisa; que los recuerdos de décadas no son un ancla, sino un acervo y que la capacidad de soñar y estrenar objetivos nada tiene qué ver con la edad.

Aquí sigo quizás falla al buscar en demasía la evocación, pero acierta al ser discreta en el resto de sus pretensiones. Es una obra de gran sensibilidad y belleza, que retoma con precisión cada uno de los lineamientos que dicta el género, sin caer nunca en regodeos innecesarios, dejando que sean la irresistible humanidad y el encanto que proyectan los protagonistas, los que se apoderen de cada uno de los instantes seleccionados y acomodados dentro de una reflexión tan sugerente e inteligente, como accesible y digerible.

Proyectada en el pasado Festival Internacional de Cine de Morelia y la Gira de Documentales Ambulante, ésta es una respuesta para todos aquellos que aún se muestran renuentes a pasar por las salas cinematográficas y echarle un vistazo a las propuestas en formato documental. Es la indispensable de la cartelera de estrenos.

Aquí sigo

Autor: Lorenzo Hagerman

País:

México, EU

Año: 2016.

Duración: 88m

Género: documental.