Y en entidades prohíben venta de flores, pasteles...

La proximidad del Día de las Madres se convirtió en motivo para que gobiernos estatales endurezcan las medidas de vigilancia con el fin de evitar aglomeraciones que faciliten la propagación del Covid-19.

La celebración de este año, marcada por la Jornada Nacional de Sana Distancia, mantiene como limitantes en varias entidades desde la posibilidad de ir a un panteón, hasta la compra de un pastel.

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En Tabasco y Sinaloa, del 8 al 11 de mayo, se prohibió el ambulantaje, así como la venta de alimentos y flores. Incluso en el primero se determinó el cierre total de actividades, lo que incluye  supermercados, bancos y mercados públicos.

En Querétaro, el gobernador Francisco Domínguez instruyó a la policía municipal y estatal a revisar que las personas no salgan para actividades no esenciales durante el próximo 10 de mayo.

En estas tres entidades se instruyó también el cierre de panteones para evitar que se lleven flores a las tumbas y se generen aglomeraciones, incluido Nuevo León, en donde también se ordenó el cierre de florerías y pastelerías; así como en Coahuila, Colima, Veracruz, Chihuahua y el Estado de México.

IDIOSINCRASIA, FACTOR PARA QUE ACATEN MEDIDAS. Al respecto, Juana Juárez Romero, socióloga de la Universidad Autónoma Metropolitana (UAM), dijo a La Razón que la idiosincrasia de los mexicanos, quienes cada año acostumbran comprar flores y visitar a sus madres ya sea en sus hogares o en los panteones, juega un papel importante en qué tanto se acatan las medidas.

Sin embargo, advirtió, no es el único factor, pues otro punto a destacar es que la sociedad mexicana no tiene el hábito de informarse.

“Hay una falta de credibilidad de la existencia del virus y tiene que ver con que vemos circular muchos memes y fake news señalando que el virus no existe”, puntualizó la especialista.