Por COVID-19 el Senado haría sesiones mixtas: físicas y virtuales

El Senado podría asumir un esquema mixto entre presencial y a distancia para sesionar mientras persistan las restricciones sanitarias por el COVID-19, dijo el coordinador de los senadores de Morena, Ricardo Monreal.

En conferencia de medios, Monreal Ávila indicó que la propuesta de los partidos de oposición podría adoptarse y las sesiones a distancia podrían ser convocadas por la Junta de Coordinación Política, y  habría plenas capacidades para discutir y votar proyectos legislativos.

En las sesiones presenciales tendrá que respetarse una asistencia reducida, que permitirá que los legisladores puedan seguir el desarrollo de las discusiones desde su oficina e incluso poder votar a distancia.

Aprovechan tecnología 

Al igual que en la Cámara de Diputados se utilizarán dispositivos electrónicos, teléfonos inteligentes, para el registro a distancia y votación.

Pero en las sesiones a distancia no se podrán discutir ni votar reformas constitucionales, ni aquellos casos que requieran una mayoría calificada, es decir, dos terceras partes de los legisladores presentes en la sesión. 

Sólo podrían abordarse temas que en su votación sólo requieran mayoría simple.

“Lo que quiere decir es que hipotéticamente tendremos varias sesiones presenciales en este Periodo de Sesiones, para resolver los asuntos de reformas constitucionales, o los asuntos de reformas a la Ley Orgánica del Congreso o al Reglamento, o los asuntos relativos a mayorías calificadas de dos terceras partes”, dijo Monreal.

También el trabajo de las comisiones se permitirá la firma electrónica para la suscripción de acuerdos, la firma de dictámenes que serán presentado a la Asamblea de Senadores.

Retomarían reglamento tras pandemia

Una vez que se supere la emergencia sanitaria se retomará el anterior reglamento del Senado para sesionar de forma presencial.

Además, el acuerdo que está logrando el apoyo de los grupos parlamentarios también incluye el regreso de las pruebas para saber si hay portadores del COVID-19 tanto para los trabajadores del parlamento, los asesores, así como para los legisladores.