“Para ser político hay que ser tolerante y no sobrecalentarse”

“Para ser político hay que ser tolerante y no sobrecalentarse”
Por:
  • bibiana_belsasso

Hijo de un matrimonio con 14 hijos y huérfano de madre a los 16 años de edad, Ricardo Monreal fue el gobernador más joven que tuvo Zacatecas y en esta entrevista muy personal se define como un político y un humano que disfruta de Vivaldi, su familia, paseos por el campo y gobernar la delegación Cuauhtémoc, desde donde ya tiene muy claro su siguiente paso en la política mexicana: ser el primer gobernador de la Ciudad de México.

Bibiana Belsasso: Me da muchísimo gusto estar con Ricardo Monreal, él es delegado de la Cuauhtémoc, bueno, político de toda la vida. ¡Ricardo, qué gusto! Esta es una historia, la verdad, muy especial. Tienes 14 hermanos.

Ricardo Monreal: Sí, mi vida es muy difícil, muy complicada. Soy hijo de una familia campesina, 14 hermanos.

Belsasso: Pero, además de todo con la tragedia de que tu mamá murió cuando estabas muy chiquito.

Monreal: Sí, mi mamá tendría 38 años cuando muere y éramos 14 de familia; el más pequeño, 10 días de nacido.

Belsasso: ¿Tú cuántos años tenías?

Monreal: Yo tenía 16 años, ese año entré a la Universidad, es decir, hace 40 años que mi madre falleció, terminaba la preparatoria.

Belsasso: ¿Qué recuerdos bonitos tienes de ella?

Monreal: Muchos, porque el vacío que deja la madre nunca nadie lo llena. Es falso el que dice: no, es que hace muchos años que murió mi madre. No, nunca se ocupa el espacio que deja la madre y siempre se sufre la ausencia.

Ella fue religiosa antes de casarse, era una mujer extraordinaria… buena cocinera, buena ama de casa, pero, sobre todo, buena madre, quería mucho a todos, éramos 14, imagínate.

Belsasso: ¿Cómo le hace tu papá para sacar adelante a 14 niños, el más chiquito de 10 días?

Monreal: La mesa era de seis, teníamos que hacer casi tres turnos y decían de broma, mi madre y mi padre, que mi madre repartía las tortillas como las barajas: “Como veo doy, como veo doy”… Fue terrible, porque mi papá nunca se casa ¿quién se casaba con un hombre que tuviera 14 hijos? Él hizo las veces de padre y madre. Los tres grandes salimos a la Universidad, vivíamos en Fresnillo, salimos a la ciudad de Zacatecas y yo más tarde, a los 21 años, me vine a México.

Belsasso: Empiezas la carrera muy chiquito, a los 16 años estudias Derecho.

Monreal: A los 16 estudio Derecho, termino a los 21 años. Me titulo ese mismo año, antes de salir de la carrera, de la graduación. Me titulo en julio y la graduación es en agosto y en septiembre me vengo a la ciudad de México a estudiar.

Belsasso: Me cuentan que cuando estabas chiquito tus hermanos y tú no podían trabajar directamente en las tierras y tu papá monta un changarrito de limonadas, de “chocomiles”, y después ése lo mandan al mercado. ¿Eso cuándo fue? ¿antes de que entraras a la Universidad?

Monreal: Antes de entrar, desde que nacimos tenía un puesto de agua fresca y los domingos vendíamos en el tianguis productos del campo, vendíamos elotes, tunas, frijol, maíz, lo que se cosechaba… quesos.

El puesto de agua fresca todavía se mantiene en manos de una hermana. Lo trabajaron mi madre y mi padre y muchos vivimos de ese puesto.

Belsasso: ¿Y ahí conoces a tu esposa, en el mercado, a Marichuy?

Monreal: Ahí conozco a mi esposa, porque mi esposa, María de Jesús, Marichuy, ella vendía “chocomiles” y yo aguas frescas, entonces nos sosteníamos de ahí, además es muy digno.

Aunque éramos del mismo rancho, de Puebla del Palmar, un rancho que tiene con nosotros desde mis bisabuelos, la conozco bien ahí, me hago novio de ella y después me voy a la Universidad, me vengo a México a estudiar el doctorado en la UNAM.

Estudio la especialidad, maestría y doctorado becado por la Universidad de Zacatecas y regreso y me caso con ella en el 85.

Belsasso: En una época muy complicada ¿no? El padre de ella estaba preso, tu madre había muerto…

Monreal: Sí, fue complicado porque él estaba pagando una condena, ellos estaban solos y ella siempre fue una mujer generosa. Tenemos 30 años de casados, ya somos abuelos, tenemos tres hijos, dos niñas y un niño, casados dos de ellos, los mayores, y la más pequeña tiene 24 años.

Pero mi mujer, también con mucho aplomo, muy trabajadora desde un principio, me ha acompañado con mucha fortaleza desde entonces.

Belsasso: A ver y en esa misma época, ya recién casado, acabas el doctorado y es cuando empiezas tu carrera política

Monreal: Tenía 25 años cuando terminé el doctorado, daba clases en la UNAM, en la escuela de Turismo, trabajaba en la Cámara, era asesor jurídico en la CNC. Preferí terminar el doctorado y después dedicarme de tiempo completo a la política.

Belsasso: ¿Cómo le hace un niño que creció en un rancho, que vendía aguas frescas y llega a ser el primer gobernador más joven de su estado?

Monreal: Sí, es una satisfacción y es un orgullo. Nos quisieron eliminar a la mala. Yo renuncié al PRI en el 97 después de haber sido diputado dos veces y senador. Era senador y luego diputado, y luego fui candidato a gobernador ya por la izquierda, por el PRD.

Estaba de presidente del PRD Andrés Manuel López Obrador, es donde lo conocí y es donde me vinculo con él desde entonces.

Belsasso: ¿Y ahí te hacen acusaciones durísimas?

Monreal: Durísimas, incluso más que a mí, a mi esposa, al papá de mi esposa, que había estado detenido. El propio presidente del PRI tuvo que retractarse porque yo sostuve que lo iba a demandar. Tuvieron que retractarse porque todo lo que dijeron era una cortina de humo.

En un libro que se llama El oso y el puercoespín, del entonces embajador de Estados Unidos, Jeffrey Davidoff, escribe que en un momento determinado de su vida púbica estaba en el Departamento de Estado con Janet Reno y a ésta le pidieron que involucrara a un político mexicano, que dijera nada más que estaba vinculado con el tráfico de drogas y comentó: no podemos meternos a la política mexicana, no hay ninguna evidencia.

Belsasso: Pero como familia ¿cómo lo vives? porque después de esas acusaciones dicen: ‘Siempre no es cierto, no hay pruebas de que esté involucrado’. ¡Pero es difícil!

Monreal: Fue terrible. Fue el gobierno, fue Zedillo, sin duda… te acusan y luego te dicen: “no es cierto, discúlpeme, no hay nada de lo que dije”.

Belsasso Pero aún así ganas la gubernatura.

Monreal: Fue difícil porque se echó encima todo el sistema, yo tenía un gobierno federal priista, Zedillo; un gobernador priista; los 55, 56 municipios, todos priistas y toda la Cámara priista. Era luchar contra un statu quo complicadísimo, pero la gente estaba decidida.

Fue un movimiento social, fue de esos movimientos que se construyen no tan fácil, le llamaron en Zacatecas El Monrealismo o El Monrealazo, fue un movimiento que se construyó en las calles y ganamos con contundencia.

Belsasso: Finalmente te fue bien en esa administración en Zacatecas y terminas muy joven.

Monreal: A los 43 termino el gobierno, iba a cumplir los 44 y me vengo a trabajar en Redes con Andrés Manuel, en el 2004, para la primera candidatura para el gobierno federal. Soy senador de la República del 2006 al 2012; luego ya soy diputado federal del 2012 al 2015; soy coordinador de la campaña de Andrés, en la última, la de 2012, y en la primera fui coordinador de una circunscripción.

Belsasso: Una campaña también pesada porque te tocó viajar por todos lados.

Monreal: Pesadísima y yo digo que esa la ganamos, en 2006, con contundencia. Le robaron la Presidencia a Andrés, yo sostengo eso y lo he escrito, pero en el 2012 me tocó caminar más porque ya como coordinador general de la campaña de Andrés sí recorrí todo el país.

Fue, quizá, la experiencia más importante de mi vida. Ésta última, la de la delegación Cuauhtémoc, también fue pesada.

Belsasso: Que tú quedaras como candidato de la Cuauhtémoc ¿fue una designación directa de Andrés Manuel López Obrador?

Monreal: Yo cada ocho días lo visito o lo acompaño. Donde anda lo alcanzo y platicamos. En una ocasión en Cuernavaca me dijo: ‘Oye, Ricardo, ¿qué vas a hacer?’ Yo le respondí lo que me dijo una vez José Luis Lamadrid Sauza, que era un extraordinario parlamentario…

Belsasso: Tú fuiste de alguna forma discípulo de él.

Monreal: De ese grupo, Lanz Cárdenas, Miguel Montes, de todos ellos, en el 88.

Y le preguntaron a José Luis Lamadrid, en una reunión política, todos estaban hablando, Miguel Montes quería ser gobernador de Guanajuato; Lanz Cárdenas, ministro de la Corte; Rocha Díaz quería ser gobernador de Guanajuato, era ese grupo de la Comisión de Gobernación y llegó el momento de preguntarle al maestro Lamadrid: ‘A ver, maestro, usted, ¿qué quiere?’ Y respondió: ‘Yo quiero bien morir, es lo único que quiero’.

Cuando me dice Andrés: ‘¿Qué vas a hacer?’ Le dije: ‘Andrés, quiero descansar, mi vida ha sido muy intensa políticamente, no he tenido un lapso desde 1988. He tenido trabajo político ininterrumpidamente en las cámaras, en el gobierno, yo quisiera un año y después incorporarme contigo’.

Entonces él me dijo: ‘No, ayúdame, te van a buscar para proponerte, me habló el Comité y me dijo que te quería proponer ser candidato a delegado’.

Le respondí: ‘No conozco la ciudad, Andrés, nunca he hecho política en la ciudad, tengo once años viviendo aquí desde que salí de gobernador, pero no conozco la ciudad’.

—‘¿Dónde vives?’— me dijo. ‘Pues en la Cuauhtémoc’.

—’¿Cuántos años tienes?’— ‘Pues once’.

—’¿Tienes la credencial para votar de ahí?’— ‘Sí’. —’Pues lo demás es honestidad y honradez’.

Gobernar la delegación Cuauhtémoc, a pesar de las limitaciones de las facultades del Mando Único, de que no tienes amplias facultades en la demarcación, es una experiencia extraordinaria.

Belsasso: Pero te has coordinado bien para poder manejar sobre todo lo del Mando Único.

Monreal: Sí, no tengo problemas con Miguel Ángel Mancera, no quiero tenerlos, no soy suicida político, o sea, la delegación Cuauhtémoc requiere gobiernos coordinados, no gobiernos confrontados y a mí me queda muy claro que para levantar la delegación Cuauhtémoc tengo que lograr acuerdos en la Federación

Belsasso: Aparte es una delegación muy complicada, donde efectivamente hay muchos antros, lugares de prostitución y más.

Monreal: Muy complicada. Delitos de alto impacto. No sólo eso…

Tienes trata de personas, tienes narcomenudeo, tienes el comercio ambulante de líderes que se convirtieron en pesadillas para el gobierno, estructuras de poder… Y tienes una corrupción institucionalizada, que tratas de suspender y de arrancar la cadena y se te ponen virulentos, es decir, es una situación complicada.

Belsasso: ¿Has tratado de romper esta cadena?

Monreal: Sí, se va a romper, porque ya no gobiernan los líderes corruptos ahí, me ha costado trabajo y lo voy a informar el miércoles, he presentado más de 90 denuncias en la Contraloría, en la Procuraduría del Estado, de la Ciudad de México, además ya es estado, aunque nos falta la formalidad.

Belsasso: Lo será, lo será.

Monreal: Voy a ser gobernador del estado.

Belsasso: Estás buscando ser, entonces, Jefe de Gobierno.

Monreal: No, gobernador. El otro día me preguntaron: ¿usted quiere ser Jefe de Gobierno? No, pero sí quiero ser gobernador de la Ciudad de México.

Belsasso: ¿De tus 14 hermanos, con quién te llevas más?

Monreal: Con los 14. Son distintos, son siete mujeres y siete hombres, la mitad y la mitad. Las mujeres todas son profesionistas… todos son profesionistas, salvo uno de ellos, que es el que se encarga del rancho. A la política nos dedicamos solamente tres.

Son médicos, abogados, odontólogos, licenciados en Ciencias de la Comunicación, es decir, todos están trabajando, me llevo muy bien con todos.

Yo no soy el mayor, yo soy el tercero de los grandes. Al mayor siempre todos lo respetamos, luego sigue una mujer, que es doctora. Todos tenemos un gran respeto.

Nos juntamos cada diciembre, ya con nuestras esposas, con nuestros hijos y con nuestros nietos, nos juntamos cerca de 100, los Monreal, ya es una familia muy numerosa, aunque ya los hermanos tuvieron de cuatro, de tres o de dos hijos, nada más, ya no fue esa familia de 14. Y todos viven, todos los 14 viven gracias a Dios.

Belsasso: Debe de haber sido una cosa impresionante tener 14 hijos y me sorprende que la gran mayoría, casi todos, son profesionistas.

Monreal: Sí, y mi papá estudió hasta el segundo año de primaria. Él era un líder natural, un líder campesino que murió no tan joven. Mi mamá se casó muy joven, a los 17 años… era una santa.

Belsasso: A ver, Ricardo, cambiando un poco… esta vida de política es muy dura ¿qué se necesita? ¿tener la piel muy gruesa para que no te importen las cosas? ¿sí te importan y dejas que no te afecten?

Monreal: Mira, sí te importan, pero el que se dedica a la política debe tener como visión muy clara que la tolerancia es parte fundamental de tu éxito.

Belsasso: ¿Eres un hombre tolerante?

Monreal: Soy muy tolerante, si no ya hubiera enloquecido con todo lo que se ha dicho de mí. Una vez, un amigo mío que era un compadre se quiso meter a la política, quiso ser presidente municipal y entonces llegó a los ocho, diez días y dijo: ‘compadre, yo ya no acepto porque esto es muy feo’.

No se requiere sino ser prudente, tolerante, cuidadoso, muy, muy prudente, no reaccionar violentamente, escuchar, no sobrecalentarte, creo que se puede y, de hecho, es una actividad que, a mí, en lo personal, me gusta.

Servir me gusta mucho, hacer cosas, me gusta hacer obras, caminar con la gente, escucharla, resolver problemas me gusta mucho.

Uno de los trabajos más importantes fue gobernar Zacatecas, el gobierno fue, para mí, una experiencia extraordinaria, y ahora ésta de gobernar la demarcación Cuauhtémoc es una de las experiencias más hermosas de mi vida.

Belsasso: Vamos a preguntas cortas. ¿Qué te gusta leer?

Monreal: Me gusta leer a Saramago. Me gustan los últimos libros del Nobel. Me gusta la Economía. Leo a los clásicos. Leo a Vania Bambirra. Leo desde Los Fundamentos del Materialismo Histórico, de Marta Harnecker, que fue en la preparatoria, que no se olvidan esos libros elementales, hasta ahora La recomposición de la teoría marxista y del capital.

Me gusta mucho la literatura inglesa, la literatura mexicana. De los mexicanos me encantan Fuentes, Octavio Paz, Luis Spota; también algunos poetas, Amado Nervo. Me gusta Neruda. Leo bastante, ahora estoy leyendo o releyendo La Revolución Francesa, que es de las revoluciones que más me gustan, para mí es el inicio de un proceso de renovación al mundo…la Asamblea, Robespierre, Fouché, Talleyrand.

Belsasso: ¿Qué tipo de música te gusta?

Monreal: Clásica, me gusta Bach, me gusta Beethoven, me gusta Mozart, me gusta Tchaikovsky, ¡me encanta Vivaldi!

Pero también me gusta la banda, me gusta la música ranchera, me gusta escuchar desde Vicente Fernández, que es amigo, Alejandro Fernández, Pepe Aguilar, que es paisano. Me gusta la música mexicana, también.

Belsasso: ¿Y para divertirte qué haces?

Monreal: Para divertirme salgo mucho con mi familia, me gusta montar a caballo, me gusta caminar en el campo. Cuando salgo, por ejemplo, los días de Navidad o finales de año, me gusta ver el ganado, caminar por el rancho, por el monte. Me gusta el silencio en esos días.

Belsasso: ¿El día más triste de tu vida?

Monreal: Cuando murió mi madre, ése es el día más triste que, además, recuerdo con mucha frecuencia.

Belsasso: Porque tu padre falleció mucho después...

Monreal: Mi padre falleció, pero lo disfruté más. Mi papá murió cuando era gobernador, hace 13 años, murió de cáncer a los 66 años, un cáncer prolongado en el cuello, pero lo disfruté más porque fui gobernador y escuchaba mucho sus consejos.

Él se sentía muy bien, muy orgulloso, y entonces yo lo invitaba a eventos, le daba su reconocimiento. Lo disfruté más que a mi madre.

Belsasso: ¿Y el día más feliz de tu vida?

Monreal: Cuando me casé con mi esposa y cuando nacieron mis hijos.

Belsasso: Complétame esta frase. Ricardo Monreal es…

Monreal: Un político y un ser humano.