Perfilan a hombre de Merkel para dirigir Consejo Europeo
El Partido Popular Europeo (PPE) eligió ayer al alemán Manfred Weber como su principal candidato a las elecciones europeas de mayo de 2019, lo que lo convierte en el elegido del bloque para convertirse en presidente de la Comisión Europea y suceder al luxemburgués Jean-Claude Juncker.
El político de 46 años es vicepresidente de la Unión Social Cristiana de Baviera, el partido hermanado con la CDU de la canciller Angela Merkel en Alemania.
El Tratado de la UE estipula que es el Consejo Europeo (los jefes de Estado y de gobierno de los 28 países asociados) el que elige al presidente de la Comisión Europea. No hay requisitos fijos. Los líderes pueden optar por quien deseen, aunque les gusta que los puestos clave estén en manos de alguno de los suyos, exprimeros ministros por lo menos.
Según una reciente encuesta, la mayoría de los europeos piensa con nostalgia en el pasado: Manfred Weber representa esos sentimientos. En su discurso ante el pleno de conservadores europeos, destacó su origen campesino de una aldea de Baviera, y con su inglés imperfecto quiso dar la impresión de ser un hombre del pueblo: “La UE se ha convertido en un proyecto de la élite”.
“Debemos crear un hogar del que los ciudadanos europeos puedan sentirse orgullosos”
Manfred Weber
Candidato al CE
El bávaro quiso transmitir una sensación de seguridad aprobando el cierre hermético de las fronteras exteriores de la UE, para “crear un hogar del que los ciudadanos europeos puedan sentirse orgullosos”. Weber abogó por defender la “identidad europea”, con una iglesia en cada pueblo. Al igual que criticó la contínua desigualdad de las condiciones de vida en el continente.
Weber considera el grupo de partidos conservadores de Europa como “una familia en la que se puede discutir, pero siempre unidos”.
Ideas de la carta alemana
Manfred Weber busca dirigir el CE con visión conservadora.
Partidario del cierre hermético de las fronteras exteriores de la UE
Aboga por defender la “identidad europea”, con una iglesia en cada
Es crítico la continua desigualdad de las condiciones de vida en Europa.