Armadoras del país van por manufactura china
La lentitud en la aprobación del TMEC, la guerra comercial entre Estados Unidos y China, así como un retroceso del mercado interno de autos, representan un nicho de oportunidad para la industria automotriz mexicana, ya que entre los planes que tiene el sector es sustituir paulatinamente la proveeduría extranjera por un mayor contenido nacional, cuya inversión anual asciende a 30 mil millones de dólares.
Para la industria automotriz, el mercado interno seguirá en contracción hasta el segundo semestre del 2020, por lo que la clave es atraer manufactura asiática, particularmente de China; no obstante, su industria es automatizada y enfocada en los autos eléctricos.
En entrevista para La Razón, Gunther Barajas, presidente del Clúster Automotriz del Estado de México, apuntó que para elevar la producción nacional se requieren más de dos mil ingenieros que el país no tiene.
“Nuestro objetivos es cómo poder desarrollar esas autopartes en México para dejar de importar, ya que si seguimos exportando vehículos con partes importadas, el impacto en la balanza comercial será muy pequeña, pero sí aumentará si sustituimos estas importaciones por productos nacionales”, aclaró.
Reconoció que existe un déficit de profesionales en el país, y es indispensable contar con “miles de ingenieros” que puedan ayudar a la industria a tener una integración alta de contenido nacional, por lo que pensamos en traer técnicos chinos.
“La tendencia de la industria es hacia la automatización y electrificación, es todo un modelo de auto distinto que requiere distintas habilidades y conocimientos. México ha estado muy enfocado en el de combustión interna y si levantas el cofre, son componentes distintos, desde el diseño de ingeniería del chasis, lo que requiere una ingeniería avanzada”, acotó.
Por lo que sostuvo que la clave de nuestro país es la conversión de ese esquema de proveeduría que consiste en traer la base, desarrollar un programa para transformarlo y que aporte algo nuevo, como una nueva geometría, materiales, bajar el peso o subir capacidades de las autopartes, lo cual cambiaría el origen, que hoy es de 30 por ciento; y evitaría problemas comerciales con el vecino país del norte.
Para Gunther Barajas, el nicho de oportunidad de la industria automotriz no está en el mercado interno, sino en la exportación, pero para ello es indispensable aumentar el contenido nacional en la proveeduría, y el sector tiene su mirada puesta en Europa y Asia.
Datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) revelan que la venta de vehículos nuevos en el país cayó en junio 11.4 por ciento, su nivel más bajo desde el tercer mes del año pasado, cuando retrocedió 13.4 por ciento y el descenso más pronunciado para un mes de junio desde 2009, cuando bajó 31.2 por ciento.
Es decir, para junio se dejaron de comercializar 13 mil 671 unidades, comparados con el mismo periodo de 2018. Las razones se deben al panorama económico de la primera mitad del año que se refleja en la reducida capacidad de compra por parte de los consumidores mexicanos.
Cifras de la Asociación Mexicana de la Industria Automotriz (AMIA) destacan que la exportación de automóviles creció 5.6 por ciento en el quinto mes del año, 304 mil 867 unidades, 249 mil 079 de ellos a Estados Unidos, es decir, tan sólo al vecino país del norte los envíos crecieron 17.5 por ciento, respecto al mismo periodo del año pasado.
También te puede interesar:
http://www.3.80.3.65/negocios/adjudican-contratos-por-349-mdd-para-primera-fase-de-refineria-de-dos-bocas-pemex-secretaria-energia-rocio-nahle-amlo/
http://www.3.80.3.65/negocios/j-p-morgan-economia-en-camino-a-recesion-tecnica/