En México sí hay un ambiente de certidumbre para invertir, por eso la Iniciativa Privada propuso obras de infraestructura bajo diversos esquemas de financiamiento; sin embargo, necesitan que el Gobierno tenga la voluntad de ejecutarlas, respetar el Estado de derecho y facilitar proyectos sin tantos trámites, señaló Eduardo Ramírez Leal, presidente de la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC).

El empresario destacó que todo el sector empresarial tiene la disposición de aportar para que la recuperación económica tenga un ritmo más rápido, luego de los choques que enfrentó por las medidas de confinamiento para evitar la propagación del Covid-19 en el segundo trimestre del año. Por ello, entregó a la Conferencia Nacional de Gobernadores (Conago) y a la Oficina de la Presidencia una propuesta con 242 proyectos de infraestructura para ejecutarse con recursos presupuestales o autofinanciados.

Estas obras visualizan una inversión de 294 mil millones de pesos, las cuales, a su vez, forman parte de las propuestas que el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) encamina junto con el Gobierno federal, las cuales se esperan sean presentadas a principios de octubre.

“Creemos que es un momento oportuno para invertir. Sólo insistimos en seguridad, Estado de derecho y condiciones de inversión rápidas. Estamos dispuestos a estar en mesas de discusión, de análisis, para apoyar, no para generar algún tipo de controversia. Hay proyectos que se pueden realizar hoy, con esquema privado. Simplemente se requiere total apoyo y arropamiento del Gobierno para que se hagan”, dijo en entrevista con La Razón.

El dirigente de la CMIC puntualizó que su propuesta es un mapeo “inicial” de las obras que consideran deben ejecutarse en el país, pues el número y el monto de inversión pueden ajustarse.

De acuerdo con su planteamiento, los estados que más proyectos de infraestructura requieren son Guerrero, con 22; Baja California, 19; Coahuila, 15; Aguascalientes, con 14; y Chihuahua, con 13.

Además, 161 proyectos están enfocados a comunicaciones y transportes, con recursos por 254 mil 124.8 millones de pesos; seguido de hídrico y desarrollo urbano, con inversiones por 31 mil 047.2 millones de pesos, y seis mil 522.5 millones de pesos, respectivamente. Para hidrocarburos sólo tienen planificado un proyecto, por 250 millones de pesos. El paquete que se espera presente el Gobierno y el CCE tiene contemplado este último sector con mayor énfasis.

“Hay una diversidad de infraestructura que necesita el país, desde darles mantenimiento o hacer nuevas obras. Yo diría que nos estamos tardando. Si ya vimos que el Proyecto de Presupuesto 2021 viene limitado y que esto no ha generado crecimiento en nuestra industria y toda la cadena productiva en la que impacta (185 actividades de 262 que contabiliza el Inegi) somos un termómetro de la economía y hay que empezar a trabajar”.

Según datos del PPEF 2021, se estima un gasto neto total de 6,295,736.2 millones de pesos, de los cuales se proyectan 829 millones de pesos para inversión, 5.3 por ciento más, en términos reales, que lo aprobado en 2020. Por su parte, la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT) tiene presupuestado 55 mil 919 millones de pesos, un alza de 2.8 por ciento respecto a los recursos otorgados para este año, de 54 mil 374 millones de pesos.

“El presupuesto es responsable, pero no es suficiente para darle mantenimiento. La SCT va a tener problemas, porque no va a poder atender todos los mantenimientos que necesita, porque no hay recursos, por eso se necesita la inversión privada. No sólo aplicarlas, sino ejecutarlas ya”, mencionó.

Por otra parte, señaló que el confinamiento provocó la pérdida de 500 mil plazas laborales en esta actividad económica; sin embargo, ya se empiezan a recuperar algunos puestos eventuales, que fueron los más afectados.

OTROS PROYECTOS

El director de la consultora Forecastim, Ricardo Trejo, consideró que otro segmento que podría contemplarse para ejecutar obras es el sector turístico, actividad que fue fuertemente golpeada por el cierre de fronteras para reducir los contagios del Covid-19.

“Si hay una política pública enfocada en infraestructura al turismo, yo creo que sería un buen mecanismo de atracción de inversiones y de promoción; es decir, si inviertes en una carretera que me conecte con algún destino para la atracción de turistas, eso le puede interesar a un inversionista”.