Texas se da un “puntapié” con caos fronterizo

Con las exhaustivas revisiones al transporte de carga que se realizan en la frontera, el Gobierno de Texas se da un “puntapié”, ya que en lugar de apoyar la resiliencia de las cadenas productivas, “se le está encareciendo la logística para que ingresen productos a Estado Unidos”, dijo el Consejo Mexicano de Comercio Exterior, Inversión y Tecnología (Comce).

El vicepresidente de Negociaciones del Comce, Eugenio Salinas, comentó que es necesario que intervenga la administración de Estados Unidos para resolver y detener las afectaciones que están provocando al comercio exterior estas inspecciones.

En su opinión, la actitud del gobernador de Texas, Greg Aboott, transgrede los principios establecidos en el T-MEC, por lo que consideró que ya es tiempo que intervengan ambos gobiernos federales para resolver el tema.

“Estamos preocupados, porque estás revisiones transgreden los principios del T-MEC; es necesario pedir que el Gobierno federal de México exija a su contraparte el cumplimiento del acuerdo”, apuntó en el marco del anuncio de la realización del XXIX Congreso del Comercio Exterior Mexicano, que se llevará a cabo el próximo 21 de noviembre, en la Ciudad de México.

Freno. Hace unos días, la Cámara Nacional del Autotransporte de Carga (Canacar) alertó sobre las pérdidas “multimillonarias” que trae este fenómeno para la economía del país y la actividad comercial en su conjunto. Después de cuatro semanas de revisiones a las salidas de los puntos fronterizos entre Ciudad Juárez y El Paso, Texas, la asociación registró 21 mil 300 unidades de carga varadas, con un valor comercial por dos mil 100 millones de dólares .

“Esto provoca afectaciones directas a las cadenas de suministro y tiene un impacto negativo en la operación diaria de los diferentes sectores productivos en ambos lados de la frontera, cuyas operaciones están en riesgo por esta medida”, señaló en un comunicado.