Se cierra la primera fase de la Leagues Cup con un balance en favor de los equipos de la MLS. Sobre todo, cuando hablamos de los equipos que en el papel, eran los favoritos para avanzar por parte de los equipos de la Liga MX. Empezando por el América, que firma una decepción más; Monterrey, Chivas que muy pronto quedaron eliminados y, claro, Cruz Azul, que regresará a México con mucho peso extra en las malestas por la escandalosa derrota que sufrió en su debut ante el equipo de Seattle Sounders. La vergüenza le sumó al menos unos siete kilitos que muy pronto Nicolás Larcamón deberá depurar de su plantel.
Accidente o no, estos marcadores humillantes suelen tener impacto inmediato. Por ahora, después del ruido mediático que significó la salida de Vicente Sánchez, entrenador que conquistó la Concacaf con el Cruz Azul le dio a Larcamón unos cuantos créditos más. Ya lo decía, este tipo de torneos a veces puede quitarte mucho más de lo que te puede aportar. Los libros de historia hoy dicen que la peor goleada de un club mexicano ante uno de la MLS en torneo oficial es el 7-0 del Seattle Sounders ante Cruz Azul.
Estoy seguro que tarde o temprano dicha marca será rota, pero, por lo pronto, el cuadro cementero tendrá que vivir con otra raya más, pues derivado del oso en Leagues Cup, es inevitable recordar la derrota por mismo marcador ante su acérrimo rival las Águilas del América y, claro, la remontada de los Pumas en una semifinal tras tener cuatro goles de ventaja en la ida, con la narración de Paco Villa y su épica frase “la madre de todas las madres, no lo quiero decir, solamente hoy, les hablo como cruzazulino, la cruzazuleada más grande”. Estoy seguro que ese sentimiento es el que comparte la gente, la afición que sigue fielmente al Cruz Azul, pero que con estos episodios oscuros en su historia, vuelve a arrastrar una historia que lo ha hecho un club grande.
Esta derrota del Cruz Azul y otras exhibiciones de los equipos de la MLS nos arrojan conclusiones certeras de que el futbol estadounidense sigue creciendo año tras año. Ya en aspectos en donde podiamos notar clara superioridad se van difuminando. Ya no son los equipos inocentes, que carecían, de colmillo, ya lucen tácticamente muy disciplinados y con calidad futbolística. Sí, aún en términos muy generales, el futbol mexicano tiene más talento, pero como se ha mencionado en el gremio, no se está desarrollando como debería ser.
La moneda está en el aire, Toluca y Tigres lucen como las cartas fuertes para tratar de traer el trofeo a México, destacar la seriedad y corazón que el Mazatlán, Puebla, Juárez, Necaxa y los Pumas que han ido de menos a más con la llegada de Nava. Entre estos últimos equipos saldrán los otros dos que acompañarán a los de Mohamed. Y que lástima para los aficionados que seguramente hoy llenarán las butacas del Estadio Chase en la Florida, porque el esperado duelo entre Lionel Messi y Keylor Navas, que muchas veces vimos en España entre Real Madrid y Barcelona, no podrá ser. El argentino por lesión y Navas por tarjeta roja, el destino no quiso que sucediera, además el partido promete ser de alta intensidad porque ambas escuadras buscan ganar para asegurar su calificación a cuartos de final.