La música de Gustav Mahler: ascensión sobre la lluvia
Gustav Mahler (1860–1911) conformó un estilo musical exclusivo: innovación bosquejada en nostálgicos y tristes apuntes melódicos de hermoso timbre y compleja estructura instrumental. Uso de la canción popular como pretexto para construir un universo melódico/armónico en distintos ciclos de canciones con versos de su autoría (“Des Knaben Wunderhorn”, “Lieder eines fahrenden Gesellen”) y del poeta Friedrich Rückert (“Canciones de los niños muertos”). Coplas a las que recurrió más de una vez para subrayar la no existencia divisoria entre música instrumental y vocal.
El autor de Resurrección concibió armonías orquestales (nueve sinfonías y una inconclusa) y obras corales que se entrecruzan y se integran en un corpus de sujeciones secundado por orfeones, los cuales alimentan los movimientos de las simetrías filarmónicas. Sinfonía No.1, ‘Titán’, constituye uno de los grandes momentos de la música occidental de finales del siglo XIX. Dada a conocer en 1889, guarda estrecho vínculo con Canciones de un caminante (1885) en temática que aborda las oposiciones convergentes entre consternación y regocijo. Dicotomía presente en el estilo de uno de los precursores de la Segunda Escuela de Viena y representante del posromanticismo alemán.
Sinfonía Coral No. 3 en re menor (Con forsa, Tempo diminueto, Scherzando, Misterioso, Tempo und Keck, Empfunden) pone de manifiesto el uso muy particular de los acordes y, asimismo, de líneas melódicas interpoladas y extendidas en la estructura formal: pieza desmesurada, de armonía afluente, que rompe con el equilibrio cromático en una suerte de resonante plasticidad arropadora. / Robusto, Resuelto: Retumbos de los metales en murmurante prosodia. Violonchelos que irrumpen hasta los lindes del silencio. Ocho cornos en consonancia unísona que plantean el leitmotiv. Flautas y cuerdas recreando una atmósfera de procelosa consumación. Hermoso solo del violín. Motivo melódico que se desplaza hasta la sonoridad grave de los contrabajos. Representación del estío y todos sus balbuceos.
Tempo di Menuetto. Muy sobrio: Dibujo sutil de los alientos y violines de bosquejo apacible enraizado en pliegues de un posromanticismo muy malheriano. Segmento grato, apacible, etéreo, arropante. / Scherzando. Sin prisa: Sublime y a la vez pujante motivo melódico suscrito por los alientos y seductores glissandos de los trombones. Interludios fascinantes de una trompeta (fuera de escena) que se escucha en la lejanía y propicia una suerte de hechizo afectivo, quimérico y triste. / Muy lento: Ondulados fraseos de pasajes Así hablaba Zaratustra (Nietzsche): las sombras, la fantasía y la infinitud en la presencia. / Alegre en tempo y atrevido en expresión: Mezzosoprano, coro (infantil y femenino. Contralto solo) que entonan “Tres Ángeles cantaban”: campanillas crepusculares custodiadas por la orquesta en timbre cristalino, tentador y cautivante. / Lento reposado. Con sentimiento: Extensión sonora en un adagio que es uno de los más conmovedores instantes de la música occidental. Cuerdas en murmullo acuoso. Flautas en gozosas articulaciones. La música, deseo empinado suscrito en el dolor: ascensión sobre la lluvia, parece decirnos Gustav Mahler.
http://www.youtube.com/watch?v=1AwFutIcnrU
Sinfonía No. 3 /Mahler
Artista: Orquesta Sinfónica Bayerischen
Género: Música de Concierto
Disquera: Grammophon