Courtois y el Madrid conquistan Europa

El Real Madrid extendió su liderato como el equipo más galardonado en el viejo continente tras conseguir su decimocuarta Champions League con la victoria sobre el Liverpool.

Los dirigidos por Carlo Ancelotti tuvieron una de las campañas europeas más memorables, llena de remontadas y sorpresas de una escuadra que estaba lejos de ser considerada favorita al comienzo de la temporada, con el Bayern, Chelsea, Manchester City, Liverpool y, por supuesto, el PSG por delante.

Sin embargo, a través de una personalidad sin precedentes, acompañada de actuaciones decisivas, el Madrid regresó a la cima tras cuatro temporadas fuera del trono. Los dos hombres más determinantes para esta escuadra se encuentran en lados opuestos del terreno de juego, ya que Karim Benzema y Thibaut Courtois tuvieron campañas con mínima comparación en términos de impacto en sus respectivas posiciones.

El talisman francés marcó en 15 ocasiones en esta edición de la competencia, dejando actuaciones memorables en las remontadas contra el Manchester City y el Paris Saint-Germain junto con contribuciones cruciales contra el Chelsea. Excluyendo a Lionel Messi y Cristiano Ronaldo, no se sí ha existido una campaña tan influyente por parte de un delantero en la historia de esta justa.

Lo mismo se puede decir para Courtois, quien tuvo atajadas puntuales en cada uno de los partidos de eliminación directa, el penal de Messi, el cabezazo de Havertz, aquella de Grealish y finalmente las estupendas intervenciones a Mané y Salah.

Ya en la final, los de Ancelotti fueron inferiores en el trámite del partido, como había sucedido a lo largo de la eliminatoria. El Liverpool salió a morder con su usual presión alta desde el primer minuto, sobrecargando el centro del campo para limitar intervenciones de Kroos y Benzema, lo cual consiguió neutralizar la salida blanca.

Klopp logró asfixiar al Madrid, pero con el balón el Liverpool comenzó a encontrar claridad debido a su ataque fluido, aunque la amenaza principal fue Sadio Mané, quien desde la posición de falso nueve continuamente aparecía a la espalda de Casemiro, generando peligro constantemente.

Mucho del éxito inicial de los Reds se debe a Thiago Alcántara, funcionando como arquitecto en el mediocampo. Fue él quien logró encontrar y explotar el enfrentamiento de Mané con Casemiro, además lateralizando hacia el sector derecho, buscando al otro organizador de esta escuadra, Trent Alexander-Arnold.

Tras la desastrosa primera parte para el Madrid, los de Ancelotti lograron recortar la distancia a través de mejoras considerables de Casemiro y Carvajal para neutralizar el bombardeo rival, además Luka Modric se hizo cargo de romper la presión, permitiendo ataques al espacio.

A pesar de no ser un equipo vistoso en el funcionamiento, el Real Madrid de Ancelotti concluyó una campaña de Champions llena de momentos icónicos, que quedarán enmarcados para la posteridad.