El último gran proyecto de Mourinho

José Mourinho tiene que estar considerado como uno de los mejores estrategas de la historia, desde su imposible victoria de Champions League con el Porto, sus dos exitosas etapas con el Chelsea, el triplete con el Inter y aquel Real Madrid del 2012, el portugués tiene un palmarés extenso.

Sin embargo, en años recientes el lusitano ha sido constantemente criticado por su aparente falta de adaptación al futbol moderno, por lo que ya no ha sido candidato al banquillo de un club de máximo nivel. No obstante, un ilusionante verano de traspasos en la capital italiana podría ser lo que necesita para callar a los críticos una vez más.

A tan solo un año del nombramiento de José Mourinho como entrenador, la Roma firmó a uno de los atacantes más destacados de la Serie A, Paulo Dybala, quien llega del club más fuerte en el país.

Así que el equipo de la capital claramente tiene grandes ambiciones, ya que está tratando de cerrar la brecha con la Juventus y los dos cuadros de Milán, pero aún está por verse si la especulación previó al comienzo de la campaña es justificada. Cabe recalcar que el estratega no consigue un título de liga desde el 2012.

A pesar de la pérdida de Henrikh Mkhitaryan, el ataque comandado por Tammy Abraham tiene mucho que ofrecer con el joven Zaniolo y el recién llegado Dybala acompañando al talismán inglés, quien se acopló con facilidad al futbol italiano, marcando 17 goles en su primera temporada con el club.

Detrás de ellos se encuentra el doble pivote de Cristante y el capitán Pelligrini, quien opera como un creador desde la base de la jugada, mientras que su compañero es un contención más convencional.

Mourinho usualmente despliega una línea de tres, por lo que mucho del dinamismo de su escuadra se origina desde las bandas con los carrileros, principalmente por el lado izquierdo con Leonardo Spinazzola.

El once titular le puede a competir a cualquiera, sin embargo la profundidad de la plantilla deja mucho que desear, considerando que Mourinho normalmente coloca mucho énfasis sobre las copas, esto podría terminar costando en una posible pelea por la liga.

Es probable que la Roma no esté para competir por el título de la Serie A esta temporada. No obstante, será interesante ver si el estratega portugués tiene un as bajo la manga por última vez con este proyecto.