Bibiana Belsasso

Napoleón y los sindicatos

MUY PERSONAL

Bibiana Belsasso
Bibiana Belsasso
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En este momento de crisis, uno de los factores más preocupantes es el aumento en el desempleo de México. Platicamos con Napoleón Gómez Urrutia, senador, y dirigente nacional del sindicato minero.

NGU: Primero mencionar que ahora que reiniciaron actividades el 1 de junio ha habido muchos contagios en muchas fábricas y plantas. En el caso del sector minero, te puedo decir que de junio para acá van 700 casos, además tenemos el otro resultado de la pandemia: la crisis económica y el desempleo; hay mucha preocupación de cómo se van a recuperar esos empleos, de programas emergentes para compensar al salario. Tengo algunas iniciativas que voy a presentar en septiembre en el Senado, donde presido la Comisión de Trabajo y Previsión Social, y con eso tratar de mitigar y compensar un poco toda esta situación complicadísima.

BB: El número de trabajadores desempleados es enorme.

NGU: Es cierto, hay un problema real, del empleo formal se habla de un millón 200 mil perdidos; del informal de hasta ocho, nueve millones más, hablamos de casi 10 millones de personas. Poco a poco se han ido recuperando, pero a un ritmo lento, porque las empresas no pueden iniciar actividades a plena capacidad. Decidimos negociar empresa por empresa, desde que vino la pandemia, primero que a los trabajadores les pagaran los primeros dos meses el 100 por ciento de sus salarios; en otras, que estaban con más dificultades, al 70; y unas poquitas al 50. Pasaron los primeros dos, tres meses y hubo que volver a negociar, porque también para las empresas, y lo entendemos, es difícil porque dicen: “No producimos, no generamos utilidades y sostener toda una planta”. Hemos tenido algunos efectos negativos, pero no tanto en nuestra organización sindical, en otras confederaciones tradicionales sí, porque muchos de esos trabajadores, por ejemplo, de informales, son de la construcción, del transporte, de muchas cosas, como CROM, como CTM, como CROC, ellos tienen la mayor cantidad de trabajadores bajo estas condiciones y ellos sí han perdido muchos empleos. Necesitamos hacer varios programas emergentes, hemos dialogado con ellos y con el Gobierno federal para presentar algunas iniciativas.

BB: ¿Cómo ayudarlos?

NGU: Establecer un salario emergente de bienestar, que le llamamos, para compensar temporalmente a los trabajadores y mejorar su nivel de vida. Sería una compensación entre el Gobierno y las empresas, es un programa que debe formar parte de ambos; y también un seguro de desempleo, temporal, por cuatro, seis meses, en lo que se inicien programas de recuperación de empleos, para que por lo menos tengan cómo sobrevivir. La propuesta es que sea entre empresas y Gobierno lo que lo paguen, y eventualmente, cuando ya esté recuperado, hasta los sindicatos, pero ahorita han perdido también participación los sindicatos. La otra es retomar lo que no se pudo aprobar el periodo anterior, de regular y controlar la subcontratación o el outsourcing, porque por un lado es una evasión fiscal de más de 500 millones de pesos al año; otra, el factoraje y, por otro lado, los trabajadores pierden sus derechos porque no tienen contratos colectivos, no tienen sindicatos, y son éstos los que han caído en desempleo en su mayoría.

Punto de vista

El líder del sindicato minero y presidente de la Comisión de Trabajo y Previsión Social del Senado, en conferencia de prensa (imagen de archivo).
El líder del sindicato minero y presidente de la Comisión de Trabajo y Previsión Social del Senado, en conferencia de prensa (imagen de archivo).Foto: Cuartoscuro

BB: El sindicato que presides ha trabajado de manera muy distinta, tiene que negociar con empresas que no han tenido apoyo, pero siguen los trabajos, y vemos en esta crisis que el SUTERM negocia con CFE un contrato colectivo que les da muchísimos beneficios a los trabajadores, pero pone en riesgo a una empresa del Gobierno.

NGU: Sí, en nuestro caso es cierto, afortunadamente el sector minero y los precios de los metales, el oro, la plata, el cobre, se han mantenido altos por la crisis y la incertidumbre mundial y la especulación, entonces hemos negociado los mejores incrementos salariales del país, de todos los sindicatos. No tenemos empresas estatales en minería, todo fue privatizado hace 30 años y en el caso de empresas públicas, Pemex, CFE, traen una serie de problemas financieros internos que repercuten en los salarios de los trabajadores, en sus prestaciones, y ahí es donde las negociaciones han sido más tensas y difíciles.

BB: Platícame del caso Peñoles.

NGU: Es un laudo histórico que gané desde marzo, que dictó la Junta Federal de Conciliación y Arbitraje, pero a nosotros nos lo comunicaron la semana pasada; la empresa Peñoles me dio de baja el 1 de enero del 2008, como salí de la ciudad por razones políticas, vengativas, quiso desconocer mi antigüedad y mis derechos; entonces nos fuimos a un juicio en el que presenté todos mis recibos de pago como trabajador, mis cuotas al IMSS, al Infonavit, y finalmente, después de 12 años y medio, lo gané ya en una resolución definitiva.

BB: ¿Qué hacer para proteger el empleo en este momento que muchas empresas se van a declarar en quiebra?

NGU: Precisamente en el Senado y como líder sindical, he promovido estas iniciativas, las voy a presentar en septiembre y vamos a impulsar lo del seguro del desempleo temporal, que permita mitigar mientras se inicien programas de recuperación a nivel general y que los trabajadores tengan un ingreso mayor para sobrevivir. Tenemos lo del salario básico emergente del bienestar; tenemos lo de regular y controlar, por eso queremos a las empresas contratistas, para que no abusen de los derechos de los trabajadores, porque como no tienen sindicato ni contratos colectivos, pues hacen lo que quieren con ellos y hay que evitar esos abusos, entrar a una época moderna, reordenar el mundo del trabajo sobre la base de la democracia, la transparencia, la libertad sindical, el respeto recíproco que debe existir entre empresas y trabajadores, pero eso requiere de ir cambiando la mentalidad no sólo de los líderes sindicales, principalmente la mentalidad empresarial y también, probablemente, de algunos sectores del Gobierno federal, pero creo que vamos en esa dirección y vamos a tener que acelerar todo porque la situación se ha complicado con esta pandemia.

De las 37 naciones que integran la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE), México es el único que no tiene un seguro de desempleo, no puede ser, países como Colombia, como Chile, como Argentina, de Latinoamérica, lo tienen y nosotros no.

Bueno, pues ya es tiempo y es una forma de ir cuidando y respetando los derechos de los trabajadores y ayudando a su bienestar, sobre todo si queremos evitar que haya conflictos sociales, yo he dicho una frase: “Para que haya paz laboral tiene que haber justicia salarial”, y creo que eso es fundamental para que lo tengamos todos.