“Reforma a la ley eléctrica es un retroceso de 100 años para el país”

Con 304 votos a favor, 179 en contra y cuatro abstenciones, el pleno de la Cámara de Diputados aprobó en lo general el proyecto de reformas a la Ley de la Industria Eléctrica, y se hizo como el Presidente Andrés Manuel López Obrador lo había pedido en esta iniciativa preferente, que se aprobara sin que se le moviera ni una coma. Sobre este tema platicamos con Enrique Ochoa, diputado del PRI y extitular de la Comisión Federal de Electricidad (CFE).

ENRIQUE OCHOA REZA (EOR): Los sectores eléctricos del mundo desarrollado funcionan a partir de un principio muy básico, pero muy importante: la energía más económica se consume primero, y en función de eso se organizan a todos los generadores de energía en función de sus precios, para ofrecerle al público la energía más económica antes que la otra. Esta iniciativa preferente que se aprobó en la Cámara de Diputados va en el sentido opuesto y establece que, en lugar de establecer por adelante a las energías más económicas, como son los parques solares o los parques eólicos, se pone por adelante las centrales de la CFE, incluyendo aquellas que utilizan los combustibles más caros y contaminantes, como el combustóleo y el diésel.

BB: ¿Cuál es la lógica precisamente de regresar al pasado?

EOR: El argumento de algunos legisladores que apoyaron esta iniciativa es que había que fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad por delante del sector privado. Yo tengo una opinión distinta: lo que hay que fortalecer es a las familias mexicanas, y la CFE se ha fortalecido precisamente de la competencia, de poder incorporar a su parque de generación a las tecnologías de punta y de poder contar con inversión pública y privada para cumplir con su mandato de ley, y eso se logra estableciendo los principios básicos de todo sistema eléctrico moderno, y así está establecido en nuestra Constitución. En los artículos 25, 27 y 28 se permite que la generación de energía eléctrica y la venta y compra de energía en el país sea una actividad abierta a la competencia libre, a la participación del sector público, privado y social, en un contexto de economía mixta, como sucede en todos los países desarrollados. Esta iniciativa preferente va en el sentido contrario y le cierra las puertas al sector privado y al sector social para que participen en el sector energético, porque pone por adelante el despacho de las centrales del sector público, sin consideración del mérito, sin consideración de costos y sin consideración del medio ambiente, eso es un error.

BB: ¿Qué estaremos esperando con esta nueva Reforma Energética que tenemos?

EOR: Recibos de luz más caros y energía eléctrica más contaminante, y en el futuro un desabasto de energía, porque la Comisión Federal de Electricidad, que es una gran empresa mexicana y que ha demostrado su gran valía en días recientes ante la helada que se sufrió en Texas y que impactó a nuestro país en los estados, principalmente del norte de México, la CFE siempre ha tomado al toro por los cuernos, pero gran parte de ello es porque se ha podido complementar desde el sector privado. Si se le carga toda la mano a la Comisión Federal de Electricidad para que haga todas las actividades del sector eléctrico y que las haga sola, hay que recordarle al auditorio que Morena en la Cámara de Diputados acaba de recortar 12 por ciento al presupuesto a la CFE apenas en diciembre pasado, entonces es un contrasentido que, por un lado, le recorten el presupuesto a CFE, cuando deberían estárselo aumentando, y por otro lado, le cierren la participación al sector privado y le concentren todas las actividades a la CFE sin darle los recursos suficientes para llevarlas a cabo.

BB: ¿La CFE por qué no va a invertir en gas, cuando vemos que escaseó ahora con la helada en los Estados Unidos?

EOR: Es una pregunta muy importante. Fíjate que la responsabilidad primera de producir el gas es de la empresa que explora y extrae gas natural, pero Pemex solamente produce un tercio del gas natural que los mexicanos utilizamos día con día, ante esa realidad es que la Comisión Federal de Electricidad de nuevo ha tomado el toro por los cuernos y ha logrado establecer infraestructura que le permite incorporar al país una cantidad adicional de gas natural, precisamente para la industria nacional que crea empleos y para generar energía eléctrica a precios competitivos y que contaminan menos. Cuando hay una interrupción en los gasoductos que unen a Texas con México se hace evidente que si no tuviéramos gasoductos, México estaría viviendo el riesgo de los apagones y de las interrupciones en el suministro de gas que se conocen como alertas críticas, por eso es muy relevante tener la infraestructura de gasoductos para tener acceso al gas natural que proviene de Texas, pero además de eso, la Comisión Federal de Electricidad tiene terminales de gas natural licuado que permiten traer gas natural por barco de las terminales de Manzanillo, en el Pacífico, y de Altamira, en el Golfo de México, en Tamaulipas, y eso ha permitido que la CFE ayude a que exista un suministro oportuno de gas natural en el país, actividad que tradicionalmente hacía Petróleos Mexicanos; es un ejemplo más de cómo la Comisión Federal de Electricidad, del brazo del sector privado, puede sacar adelante grandes problemas con grandes soluciones.

BB: ¿Esta reforma dice que ya no puede participar el sector privado?

EOR: Digamos que establece que la prioridad en el Sistema Eléctrico Nacional es el sector público.

BB: ¿Qué va a pasar con todos estos contratos ya establecidos?

EOR: Pues es un riesgo muy importante, porque se puede interpretar como una violación de los tratados internacionales en materia de inversiones, y eso podría derivar en litigios internacionales.

BB: ¿Qué nos deja esta reforma?

EOR: Bueno, pues que esta reforma regresa al país 100 años y que hacia adelante deberíamos de impulsar que todo ciudadano en nuestro país tenga derecho a producir y a consumir su propia energía limpia, utilizando la tecnología de punta para beneficio suyo, de la creación de empleos y de los servicios públicos que requiere el país.

BB: ¿Cuál es la idea o cuál es el argumento de la gente que ha estado a favor de cambiar la Reforma Energética?

EOR: Ha habido algunos argumentos interesantes en cuanto a la necesidad de fortalecer a la Comisión Federal de Electricidad, ante ello yo coincido que la Comisión Federal de Electricidad es una empresa fundamental en el desarrollo del país, pero también hay que recordar que la Comisión Federal de Electricidad, a partir de la apertura energética, ha tenido utilidades por ya cuatro años consecutivos, y además es una empresa que tiene grado de inversión internacional en las tres agencias crediticias que así lo reconocen, es una empresa, además, que tiene una deuda manejable, y que por otro lado es una empresa de las más grandes del país y goza de cabal salud financiera, entonces la Comisión Federal de Electricidad es una empresa fuerte y creo que se ha hecho fuerte a partir de la posibilidad de recibir inversión privada y de actualizar su parque tecnológico y de incorporar los avances técnicos que ofrece el mundo. Creo que esta iniciativa preferente, que le obliga a utilizar el diésel y el combustóleo antes de incorporar los parques eólicos y solares, va en sentido opuesto a lo que ha fortalecido a la CFE en el pasado, y creo que va en el sentido opuesto a lo que el país podrá requerir en estos momentos.