Entre memes y distractores

Entre memes y distractores
Por:
  • javier_solorzano_zinser

El Presidente de nuevo dio muestras de su capacidad para provocar debates y, quizá, distraer la atención de temas controvertidos.

La rifa del avión es una de las cinco opciones que presentó el mandatario para deshacerse de la nave de una vez por todas, lo cual ya se vio, y se sabía, que no era una empresa sencilla. En todo este lance hay una falta de previsión, porque ha quedado la impresión de que pensaron que vender el avión era algo así como ponerlo en un lote de autos para que apareciera el mejor postor.

El Presidente lanzó la provocación, a sabiendas de que le iba a dar resultado; el asunto fue tema en todos lados a lo largo del fin de semana. Al mandatario está visto que no le importa la infinidad de reacciones y comentarios; no se detiene en atender el sentido que tienen, de dónde vienen y qué hay de fondo en ellos.

El tema llegó a la prensa internacional, la cual lo tomó con humor y sarcasmo, para decir lo menos. Lo que no ha tenido freno alguno, y está desatado, es el humor e ingenio de los memes que han proliferado en las redes; la mayor parte de ellos tiene un alto sentido del humor que se combina con un tono de sarcasmo e ironía; hay evidencia de burla hacia el mandatario y hacia nosotros mismos.

Lo que es claro, es que el Presidente sabe el peso que tiene en la sociedad el avión presidencial. Le ha sacado el mayor jugo posible; es un asunto que sabe que indigna a sus furibundos seguidores y por el que no se razona.

Estamos en tiempos en los que la reflexión y el sentido que tienen las cosas no forman parte de la dinámica de la sociedad ni de los debates. El avión presidencial es uno de los asuntos en los que no hay manera de establecer alternativas a la obsesión de venderlo.

Para el Presidente, el tema es una de las representaciones más acabadas para mostrarse diferente de sus antecesores y, sobre todo, del sentido de gobernar que le imprime a su gestión.

Independientemente de todas estas consideraciones, lo que queda claro es que el Presidente sigue sin encontrar cómo deshacerse del avión; y en el camino, lo que sí ha encontrado es que el tema le sirve para fustigar el pasado, para provocar reacciones y, sobre todo, para que se hable de ello.

En medio de todo esto, algunos asuntos de enorme relevancia se han diluido, y no se ha reparado en su importancia  y bajo la dinámica en la que están. La puesta en marcha del Insabi ha sido confusa y controvertida, y ha enfrentado abiertamente a varios gobernadores con el Presidente.

Le ha aparecido a López Obrador, por primera vez, una real oposición. Los gobernadores tienen peso propio, lo que los coloca como una oposición a la que no se puede avasallar como eventualmente sucede en el Congreso, con la mayoría de Morena.

Los gobernadores se pueden colocar al tú por tú con el Presidente; no es casual que el mandatario se haya tenido que sentar con ellos, en un hecho poco usual en lo que va del sexenio. Es evidente que con el Insabi más que hablar de resistencias, se debe hablar de su instrumentación la cual ha sido confusa y ha afectado directamente a los ciudadanos.

Esto debiéramos debatir, no porque sea poco importante la venta del avión presidencial, la cual se ha convertido en un elemento para fustigar más al pasado.

Si lo que se buscó fue hablar de este asunto para dejar en segundo plano los problemas de instrumentación del Insabi o para distraer la atención de la nueva caravana migrante que llegó este fin de semana, poco durará el efecto, porque mientras no se arreglen los problemas del Insabi a los ciudadanos podrán contarles lo que sea, pero su salud seguirá afectada y desatendida.

Como sea, los memes resultaron divertidos, ingeniosos y con mensajes directos.

RESQUICIOS.

En el proceso legal que se sigue al abuelo del niño que disparó a sus compañeros y su maestra en Torreón, todo es muy delicado y con una infinidad de vericuetos. Con el regreso a clases viene una enorme tarea: explicar que pasó, y que regrese la confianza y la tranquilidad.