Fervor botanero

Fervor botanero
Por:
  • jorgem-columnista

Una de las costumbres alimenticias más difundidas entre la población urbana es el consumo de frituras, generalmente rebosantes de chile. La industria se aprovecha de la afición a lo picoso y tiene saturado el mercado con productos crujientes sumamente publicitados. Frente a ellos, los vendedores callejeros compiten en desventaja, pero aún cuentan con públicos que se deleitan con las botanas preparadas a mano. Para resistir los embates de irritantes y microbios, los estómagos de los capitalinos reciben entrenamiento desde temprana edad.

Ante lo irresistible del antojo, la prudencia y las culpas pasan a segundo término. El aparato digestivo puede sufrir cuando se ingieren sin control los endiablados bocados que engrosan las filas de la comida “chatarra”. Pero es sorprendente que, al parecer, muchos chilangos hayan desarrollado inmunidad a desórdenes gástricos y enfermedades bacteriológicas.

[caption id="attachment_1096032" align="alignnone" width="696"] Las frituras callejeras se elaboran con entusiasmo y cada cliente elige las dosis de limón y salsa picante. Foto: JMM[/caption]